Con un penalti lanzado a lo Panenka por el lateral del Real Madrid Dani Carvajal y dos paradas de Unai Simón, la selección española se ha proclamado esta noche en Róterdam campeona de la Liga de Naciones, tras un partido muy equilibrado y con pocas ocasiones, donde España ha dominado ligeramente pero no ha acertado en los últimos metros. Es el quinto título de la historia de la Selección después de tres Eurocopas (1964, 2008 y 2012) y el Mundial de 2010.

El equipo español saltó al césped del estadio De Kuip con solo dos variaciones respecto a la alineación del pasado jueves, cuando la selección se impuso por 2-1 a Italia en la semifinal del torneo. Asensio entró por Rodrigo Moreno y Fabián sustituyó a Mikel Merino. El centrocampista sevillano del Paris Saint Germain ha sido clave para neutralizar a Modric y garantizar la progresión al ataque del equipo español.

A medida que transcurrió el partido, el equilibrio fue derivando en dominio de España, con dos ocasiones muy claras de Ansu Fati y Asensio en los últimos diez minutos del partido. No obstante, Croacia logró forzar la prórroga y alcanzar la tanda de penaltis, confiando en la suerte suprema y en la superioridad en la grada –unos 25.000 aficionados croatas por 6.000 españoles– para ganar el torneo.

Esta vez la gloria aguardaba a la tricampeona de Europa. Unai Simón atajó dos penas máximas y Dani Carvajal, a lo Panenka, dejó en nada el fallo de Aymeric Laporte que alargó a espera. Tras cerrar un triplete histórico en 2012, la 'Roja' levantó una nueva copa, la quinta de su historia en una gran competición tras el Mundial de 2010 y las tres EURO (1964, y 2012), y un refuerzo para Luis de la Fuente de cara al futuro.

El técnico riojano no rotó demasiado para pugnar por el título y sólo Fabian Ruiz y Marco Asensio fueron sus novedades. El centrocampista del PSG se situó junto a Rodri Hernández, pero estuvo muy pendiente de que Luka Modric no jugase cómodo. Dalic replicó con Mateo Kovacic cerca del mediocentro del Manchester City para intentar cortocircuitar el juego de la tricampeona continental.

Sin encontrar a su '10' en zonas de peligro, los croatas dieron algún susto a Unai Simón, sobre todo con un balón largo a la espalda de Le Normand y Laporte que Kramaric, aunque se llegó a plantar solo ante el portero del Athletic Club, no aprovechó bien estorbado por el central del City que terminó por enviar la pelota a saque de esquina.

No amenazó mucho más el combinado balcánico, salvo un par de cabezazos de Perisic, mientras que España tampoco fue capaz de inquietar a Livakovic, con poco de Asensio, más activo en el tramo final, Yéremi Pino y Álvaro Morata, que en esta ocasión no pudo jugar de forma tan acertada de espaldas a portería como en la semifinal ante Italia.

España se hiciese con el mando para el tramo final del encuentro. Ansu Fati, tras otra buena jugada por el costado izquierdo, tuvo la mejor del partido, pero su disparo lo sacó bajo palos Perisic. Asensio, con la derecha, disparó demasiado cruzado en otra buena opción y la final se fue a la prórroga.

Croacia recuperó algo de energía en el tiempo extra, pero no pudo zafarse del mayor dominio del combinado español, que fue el que tuvo las mejores ocasiones, ambas de Dani Olmo, en busca de evitar una tanda de penaltis que esta vez sonrió para volver a saborear un título.