Los buceadores de la Armada española ya están en Barcelona, donde este lunes tienen previsto explosionar el proyectil, probablemente de la Guerra Civil, hallado ayer en la playa de Sant Sebastià de la Barceloneta. El artefacto, de 1,10 metros de alto y 80 centímetros de diámetro, fue localizado en el fondo del mar, a unos 25 metros de la playa, por un agente fuera de servicio del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil que se estaba bañando en la zona. El hallazgo obligó a cerrar al público la playa de Sant Sebastià, una de las más concurridas de la ciudad.

Los encargados de hacer explosionar de forma controlada la bomba serán buceadores de la Armada, que ayer zarparon de la base de Cartagena (Murcia) y han llegado a Barcelona sobre las 1:20 horas de este lunes. Los especialistas están reunidos desde primera hora de la mañana para decidir cuándo iniciar la neutralización del artefacto y cómo hacerlo. La reunión se celebra en la Barceloneta, al lado del Club Natación Barcelona, junto a la playa de Sant Sebastià, según fuentes del instituto armado, tal y como publica Efe.

La playa de Sant Sebastià de Barcelona, parte de la Barceloneta, permanecerá cerrada al baño hasta el lunes, cuando está previsto que llegue un barco de la Armada que se hará cargo de explosionar una bomba antigua hallada sumergida en el agua, a tres metros de profundidad y a 25 de la costa.

Según ha informado el teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, los artificieros de la Guardia Civil han comprobado esta mañana el estado del artefacto explosivo, un proyectil aéreo probablemente procedente de la Guerra Civil de 1,10 metros de alto y 80 centímetros de diámetro, y han visto que "es potencialmente peligroso manipularlo".

Por ello, han solicitado la ayuda de los especialistas de la Armada, que ya han zarpado de Cartagena (Murcia) y que llegarán mañana, cuando procederán a hacer una explosión controlada del artefacto, que ha sido descubierto casualmente por un agente del Grupo Especiales de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil mientras se bañaba en la playa.

La Guardia Civil ha desalojado este domingo una parte de la playa por la presencia de un posible artefacto explosivo dentro del agua. La Guardia Urbana ha acordonado la zona y ha prohibido el baño en toda la playa.

Testigos presentes en la zona han explicado que varias lanchas de la Policía han delimitado un perímetro en tierra y mar que se ha ido ampliando a medida que avanzaban los minutos.

El explosivo ha sido localizado por un guardia civil fuera de servicio que es miembro del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (Geas) a unos 40 metros de la orilla y la zona ha sido acordonada. La unidad de artificieros de la Guardia Civil se ha desplazado a la playa para hacerse cargo de desactivar el artefacto, que, aunque aún está siendo inspeccionado, podría proceder de la Guerra Civil.