Mafalda ha sido una residente más en los hogares en los que ha entrado, de la mano de los más pequeños de la casa. Sus tiras cómicas, un elemento más en las estanterías del mundo. Quino nos ha dejado hoy, pero permanece el legado de humildad e incomprensión por el mundo que le rodeaba de la mano de su niña más querida. Sus viñetas han conseguido acompañar a generaciones de lectores, ávidos y no ávidos, grandes y pequeños.

Mafalda nos demostró que de la inocencia nace el saber, y que todos estamos tan condicionados a la comprensión como ella. Con Quino se marcha también el icono global, una muestra de la humanidad que el gráfico consiguió transmitir con unos garabatos y frases que comparten miles desde su nacimiento.

El humorista argentino, de nombre Joaquín Salvador Lavado Tejón, ha fallecido a los 88 años. Quino nació en Mendoza en 1932. Hijo de andaluces emigrados a Argentina en 1919, descubrió su vocación de mano de su tío Joaquín Tejón, pintor y diseñador gráfico, e inició con 13 años los estudios de Bellas Artes en su ciudad natal, según recoge Europa Press.

Los abandonó en 1949, decidido a dedicarse a las historietas y al humor. En 1954 publicó su primera página y, desde entonces, ha publicado sus viñetas, dibujos e historietas en diarios y revistas de América y Europa. Con el golpe de Estado en Argentina de 1976, Quino se exilió en Milán. En 1990 adoptó la nacionalidad española y ha alternado residencia también entre Madrid y Buenos Aires.

Reconocido como uno de los más destacados humoristas gráficos del ámbito internacional, Quino alcanzó la fama con las tiras de Mafalda. Este personaje había nacido para una campaña publicitaria frustrada, poco después de que publicase su primer recopilatorio, Mundo Quino (1963).

La primera historieta de Mafalda se publicó el 29 de septiembre de 1964 en el semanario Primera Plana de la capital argentina. En la serie Mafalda, Quino reflejó el mundo de los adultos visto desde los ojos de un grupo de niños.

Las historias de Mafalda se han traducido a quince idiomas y se han publicado en diarios y revistas de todo el mundo. En 1973, Quino dejó de dibujarla. Durante sus últimos años en activo, Quino publicó principalmente en el diario Clarín y sólo dibujó de nuevo a Mafalda para campañas a petición de organizaciones como UNICEF o el Gobierno argentino.

Ciudadano Ilustre de Mendoza y Buenos Aires y catedrático honorífico de Humor Gráfico de la Universidad de Alcalá de Henares, Quino ha recibido numerosos premios, entre ellos, el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en el año 2014.

También ha sido reconocido como Humorista Gráfico del Año del Salón Internacional de Montreal (1982), dos Konex de Platino de Artes Visuales-Humor Gráfico (1982 y 1992) y el Konex Especial (2012), el Iberoamericano de Humor Gráfico Quevedos (2000) y el Romics de Oro (Roma, 2011).

Mafalda y el tiempo

Como bien dice en esta viñeta, la rutina siempre se entromete con las cosas verdaderamente importantes de la vida. 

Mafalda y el mundo

El mundo, la figura que más cuidados necesita,

Mafalda y el dinero

El capital vuela, como bien compara Mafalda en esta viñeta con el Concorde.

Mafalda y la ideología

Quino con una de las obras magistrales de su carrera. Ideología a golpe de porra.

Mafalda y la cultura

En una época convulsa para la cultura, y para todo en general, esta viñeta ejemplifica a la perfección la importancia que se le da al capital por encima de otras cosas importantes, como la cultura. 

Mafalda y el trabajo

El mundo de Mafalda.

Mafalda y la desobediencia

Una viñeta al más puro estilo, lo haré si yo quiero.