La última película de Pedro Almodóvar ha vuelto a llevar al cine español a los premios más importantes del séptimo arte. Dolor y gloria está nominada a Mejor película de habla extranjera en los Premios Oscars 2020, un posible premio que podría hacer que este año se convirtieran en tres, las estatuillas conseguidas por el director español en este festival.

Dolor y gloria arrasó en los Premios Goya del pasado mes de enero, consiguió siete "cabezones" y fue la película más galardonada de este 2020. Se llevó los premios de Mejor película, Mejor dirección, Mejor actor, Mejor guion, Mejor actriz de reparto y Mejor música original. Pero los Premios Oscars son otra cosa, en esta edición compite contra cuatro películas más en la categoría de habla extranjera. Parásitos, Los Miserables, Honeyland y Corpus Christi, son las principales rivales de la cinta española. Pero además, Dolor y gloria, podría cosechar una estatuilla más, ya que su actor protagonista, Antonio Banderas, también está nominado a Mejor actor.

El director manchego ha vuelto a hacer historia, ya consiguió dos estatuillas por sus películas Todo sobre mi madre y Hable con ella, películas muy diferentes a la elegida por la Academia Española de Cine de este año para representar a nuestro país en la gala de cine más mundial.

Dolor y Gloria está rodada en Paterna, su protagonista, Salvador Mallo (al que interpreta Antonio Banderas) es un cineasta un tanto frustrado, un director de cine en horas bajas, con problemas personales derivados de sus vivencias en la infancia y en su juventud. Estudió en un colegio de curas del que salió disparado en busca de sus motivaciones más personales e insanas. De Paterna a Madrid, de la cueva al universo de la capital. Los 80 fueron de la movida, de las drogas y las libertades más significativas.

Tráiler

Su madre, su infancia, la muerte, el primer amor. Tópicos de arte y la literatura, Almodóvar los desgrana en su piel y en otra que se ha inventado. Distingue en Dolor y Gloria que la escritura y las drogas duras lo salvaron, fueron la terapia a la desolación del director de cine. La película es una biografía inventada a base de flashbacks que guían al espectador al presente, y así entender el porqué y el cómo del protagonista.