Estampa, la primera feria de arte de la pandemia que se celebra en España, ha abierto hoy sus puertas en Madrid convertida en un banco de pruebas de cómo se celebra una cita de este tipo: pasillos más amplios, renovación de aire cada veinte minutos y 3.548 personas de aforo máximo.

“El nivel de ilusión y de exigencia es muy alto”, ha dicho hoy el director de la feria, Chema de Francisco, que ha inaugurado hoy la feria en Madrid junto al ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez-Uribes.

La feria, que tradicionalmente se celebra en otoño pero ha ido posponiendo su celebración por la pandemia, abre sus puertas rodeada de expectación hasta el próximo 11 de abril.

Hace un año que en España no se ha celebrado ninguna feria de arte. La última fue ARCO, apenas una semana antes del confinamiento y, según un informe del CSIC, fue uno de los muchos focos de entrada del virus en España -junto con los partidos de fútbol y otros eventos-.

La feria cuenta con el mismo número de galerías (70) que en su edición anterior, pero con mucho más espacio y medidas de seguridad para combatir la crisis sanitaria.

Ifema -feria de Madrid-, ha aumentado la superficie de Estampa para hacer más amplios los pasillos, que sea fácil el tránsito y mantener una distancia de 1,5 metros entre visitantes. El pabellón tiene 10.800 metros cuadrados.

Todo es digital: entrada, planos y catálogo. Los 400.000 metros cúbicos de aire del pabellón -ubicado al lado de los dos que acogieron un hospital temporal durante el pico más alto de la pandemia- se renuevan tres veces a la hora, cada veinte minutos, según ha explicado el director de la feria.

Para acceder, cada visitante debe pasar un control que registra su temperatura en el torno de acceso y en la entrada se reparten mascarillas FPP2.

El aforo máximo es de 3.548 personas a la vez, aunque el director del evento asegura que esta es “una cifra que no se suele alcanzar” habitualmente ni en ediciones anteriores.

La feria, con un carácter más local de ARCO, ha visto como poco a poco sus instalaciones iba recibiendo gente desde que a mediodía haya abierto sus puertas, aunque sin dar la sensación de multitud.

“Hemos comprobado que la cultura es segura y se puede ir a los museos, los teatros o los conciertos. Debemos hacerlo y podemos hacerlo, porque la cultura es necesaria, es un derecho y no es un capricho, tenemos que hacer todo lo posible para que siga activa”, ha dicho hoy el ministro, José Manuel Rodríguez-Uribes, durante la inauguración.

El ministro tiene la esperanza de que ARCO, la feria internacional de arte más importante de España y que se ha pospuesto a julio, pueda celebrase. “Estoy muy esperanzado con el proceso de la vacunación. Este es el camino para llegar bien a julio”, ha asegurado.

El sector del arte contemporáneo ha sido uno de los más afectados por la pandemia: a la falta de ferias nacionales a internacionales -todas las grandes citas se han cancelado- se suman las restricciones de movilidad de los posibles compradores.

El sentimiento entre las galerías es de expectación, la feria suele ser un preludio de ARCO.

Alberto de Juan, director de la galería Max Estrella, una de las más importante del panorama nacional y habitual de ferias internacionales, ha reconocido que afronta esta feria “con mucha ilusión”.

“La situación (de los últimos meses) es de gran dificultad, como no podía ser de otra manera, el movimiento se ha reducido muchísimo -explica-. La facturación ha descendido de una manera muy fuerte y esta feria es un paso adelante para intentar recuperar la normalidad”.

Su catálogo está compuesto por ocho artistas, cuatro hombres y cuatro mujeres. Ente ellos se encuentra Eugenio Ampudia, que lleva varias piezas de su famoso concierto para plantas en el Teatro del Liceo en Barcelona, celebrada el año pasado y que luego fueron entregadas a los sanitarios en primera línea de la pandemia.

Estampa se presenta este año con un lema claro “recuperar la actividad del galerismo en España”, en un momento de “extraordinaria y urgente situación del mercado artístico nacional”.

"El mundo de la cultura tiene un comportamiento adecuado para no caer en errores de los que podamos arrepentirnos. Estamos muy contentos de poner en marcha otra vez nuestro mercado", ha subrayado el director de la feria.