Este martes fue portavoz del jurado del Benidorm Fest. "Queremos dejar claro que no juzgamos a los artistas, sino las canciones en el contexto de Eurovisión", insistió Beatriz Luengo, algo que no evitó algunos abucheos por parte del público.

La madrileña es una de las personas más completas del jurado. Ha trabajado como actriz, cantante, compositora y bailarina. Aunque muchos recuerdan a la artista por su papel como Lola en Un paso adelante y por su relación sentimental y musical con Yotuel Romero, con el que tiene dos hijos, la madrileña de 41 años llegó al espectáculo mucho antes y de la mano del entrañable payaso Miliki.

Luengo cantó en el programa infantil El circo de Rita y Miliki cuando tenía 11 años. Después firmó con PolyGram para un disco que finalmente nunca vio la luz y comenzó su carrera en musicales como Peter Pan o Grease.

Su primera película se llamó Pasión adolescente (Joaquín Llamas), la rodó con 16 años y plasmaba el romance entre una joven y su profesor. Tuvo también varios papeles secundarios en series como El comisario, Periodistas, Policías o Robles Investigador hasta que, cuando tenía 18 años, llegó a su vida Un paso adelante, ficción que supuso su salto al mainstream y también posibilitó que conociera a Yotuel.

Dos bodas en Las Vegas

La pareja no se ha separado desde entonces, pasaron por el altar de Las Vegas en 2008 y 2021 y son padres de dos hijos, D’Angelo y Zoe. El primero nació en 2015 y la segunda, en 2021. De la serie de Antena 3 salió el grupo UPA Dance, del que era voz principal y en el que compartió escenario con sus compañeros Pablo Puyol, Mónica Cruz, Miguel Ángel Muñoz, Silvia Marty, Erika Sanz y Raúl Peña.

Estuvieron en activo de 2002 a 2006 y llegaron a sacar cuatro discos al mercado con hits como Sambame o Dance Morenita. Pese al gran impulso que supuso en su carrera, ha declarado en alguna ocasión que no se sintió satisfecha con esa etapa.

En 2005 editó su primer disco, Mi generación, de música fusión y con colaboraciones con artistas como Justin Timberlake. Posteriormente decidió marcharse a Francia para continuar desarrollando su carrera como cantante y en 2006 grabó su segundo álbum, BL, en el que recuperó canciones del disco anterior y nuevas versiones.

Su tercer álbum, Carrousel, salió a la venta en España, con la producción de Yotuel Romero y Andrés Levin, incluyendo su sencillo de lanzamiento, Pretendo hablarte, sintonía oficial de la Vuelta Ciclista a España 2008.

En 2019 protagonizó algo menos agradable cuando, en un vídeo para Growing Up Latino, de la revista Billboard, no solo comenzó a hablar con acento latino, sino a utilizar palabras propias de países latinoamericanos, como crayones, para referirse a labiales o carro para referirse a coches, vídeo que recuperaron muchos eurofans este pasado martes:

Pese a que chocó escuchar a alguien del madrileño barrio de Hortaleza hablar así, algo que pasó también recientemente con Aitana (Barcelona) al hablar con acento colombiano, es algo coherente con el discurso de Luengo, que siempre ha insistido en las similitudes entre los latinos y los españoles.

Años después realizó un parón en su carrera musical para escribir y promocionar su libro El despertar de las Musas (Destino), pero estuvo componiendo y grabando para artistas como Orishas o Ricky Martin en 2020, por lo que fue nominada alos Grammy Latinos. Ese mismo año presentó el vídeo Ojos de Mandela con Alejandro Sanz.

También publicó un vídeo interpretando la respuesta femenina al tema de Maluma Hawái modificando la letra original, que en apenas un día se hizo con 4 millones de visitas. Ya en 2021, formó parte del sencillo Rebelde de Yotuel junto a Omar Montes, versión del Soy rebelde de Jeanette.

Este se podría decir que fue su año de oro: lanzó la canción Patria y Vida de Yotuel Romero, Descemer Bueno, Gente de Zona, Luis Manuel Otero Alcántara, Maykel Osorbo y DJ El Funky, canción que se viralizó rápidamente en redes pero que encontró varias voces críticas entre los medios cubanos. Pese a esto, la pareja consiguió un Latin Grammy a la canción del año.

"Lloro porque no se pueden imaginar lo que hemos sufrido. Yo, como mujer compositora, he tenido amenazas de todo tipo. Me tumbaron mis redes sociales, nos quitaron el vídeo de YouTube… la canción molestó muchísimo y solo habla de derechos humanos", dijo desde el escenario de Las Vegas, entre lágrimas. En mayo de 2023, formó parte del reencuentro de Un paso adelante para Atresplayer