La imagen es más propia del mes de agosto que de marzo. Es miércoles, día laborable, el reloj marca las 9:30 en la calle José Abascal de Madrid y no hay tráfico. Hay coches, sí, pero circulan como si fuera casi un festivo. Normalmente, esta calle está totalmente taponada en hora punta. ¿La razón? Sí, esa palabra que nadie deja de pronunciar: coronavirus.

Madrid es la Comunidad Autónoma más afectada por el brote del coronavirus en España. Cerca de la mitad de los 2.000 contagiados se concentran en Madrid, lo que llevó el lunes a la presidenta de la Comunidad a tomar medidas: Isabel Díaz-Ayuso anunció que a partir de hoy cerrarían todos los colegios, guarderías y Universidades. Además, muchas empresas han enviado a sus empleados a trabajar desde casa.

El resultado es un Madrid a medio gas, con mucho menos tráfico y un transporte público desierto: