Hace exactamente un año, el 8 de marzo de 2020, el Betis y el Real Madrid se enfrentaban en el Benito Villamarín de Sevilla con 51.521 aficionados en las gradas. Fue el último partido de LaLiga con público.

Han pasado ya 12 meses desde que la pandemia de coronavirus obligó a decretar el Estado de Alarma y desde entonces ningún encuentro de Primera y Segunda División se ha celebrado con aficionados. Se acabó la temporada anterior y comenzó la presente, pero siempre con total silencio en los estadios. Y también en los pabellones de la ACB, la otra liga del deporte profesional afectada por el cierre total de las gradas.

Los estadios vacíos han tenido un impacto de 848 millones en los clubes de LaLiga"

José Guerra, director general corporativo de LaLiga

Esta desalmada imagen de una de las pasiones más viscerales que hay en España, choca tremendamente con las fotografías y vídeos que se han publicado en los últimos meses de salas de conciertos, teatros, cines y hostelería. ¿Por qué está permitido que haya público en espacios cerrados, que haya gente comiendo, obviamente sin mascarilla, en el interior de restaurantes y que no se pueda disputar un partido al aire libre con aficionados?

¿Por qué puede haber 5.000 personas en el WiZink Center viendo un concierto de Raphael en un espacio cerrado y no puede haber 20.000 en el Camp Nou asistiendo a un partido de fútbol al aire libre?

El papel del CSD con el coronavirus

La respuesta es compleja, pero en resumidas cuentas se trata de los diferentes criterios que tienen el Ministerio de Sanidad y las autonomías a la hora de tomar decisiones sobre las restricciones.

Mientras que los aforos de los espacios culturales como cines, teatros o salas de conciertos depende de cada Comunidad Autónoma, en el caso de LaLiga es competencia directa del gubernamental Consejo Superior de Deportes (CSD). Cuando se empezó a planear la desescalada, se determinó que el regreso de los aficionados fuera una decisión del CSD en las consideradas ligas profesionales, es decir, la Primera y la Segunda División del fútbol masculino y la ACB de baloncesto.

En el resto de competiciones deportivas, la decisión queda en manos de cada Comunidad Autónoma. Eso hizo posible que se viera público, por ejemplo, en partidos de la Copa del Rey. Pero para LaLiga habrá que esperar todavía. En diciembre hubo una reunión entre CSD, LaLiga y ACB, pero después llegó la tercera ola de enero y echó por tierra cualquier plan inicial.

Tebas confía en que haya público en abril-mayo

El presidente de LaLiga, Javier Tebas, se pronunció por última vez al respecto en un foro organizado por Soccerex a principios de febrero, cuando la curva de contagios de la tercera ola todavía estaba disparada. "Nuestro reto es terminar la competición porque la situación actual es mucho más difícil que la temporada anterior", señaló. "Si en febrero aumenta la vacunación y disminuye el nivel de contagio, es posible que en abril o mayo podamos estar en los estadios".

Desde el CSD, sin embargo, prefieren no poner fechas. "Creemos que actualmente el deporte tienen que discurrir sin público. Es lo correcto hasta que vuelva la normalidad", indican fuentes del organismo. Lo que tienen claro es que no quieren dar pasos en falso como en Inglaterra, donde se permitieron aficionados en la Premier League en diciembre y a las dos semanas tuvieron que cerrar las puertas por la situación epidemiológica. "Aquí cuando abramos, se abrirá bien", insisten en el CSD, que trazará un calendario unificado para el regreso de hinchas en Primera, Segunda y ACB.

Evitar un "mensaje de relajación"

Cualquier decisión que tome el CSD respecto al regreso de aficionados será consensuada primero con el Ministerio de Sanidad. Y la prudencia marcará la agenda. En el Consejo Superior de Deportes creen que abrir 40 estadios y 20 pabellones enviaría "un mensaje de relajación" a la sociedad.

Los eventos multitudinarios han estado en el punto de mira desde que comenzó la pandemia. "Con un estadio de fútbol no hay que tener en cuenta únicamente que sea un espacio grande, al aire libre y en el que se pueda guardar la distancia. Intervienen muchos factores más y ahí está el problema, en lo que envuelve un partido", explica a este periódico José Jonay Ojeda, especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública.

"El problema está en el transporte hacia el estadio, en las horas previas y posteriores al partido, cuando se suele consumir alcohol, y en las entradas y salidas. Es muy difícil gestionar eso de forma escalonada", añade José Jonay Ojeda, que además es portavoz de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (Sespas).

El Ministerio de Sanidad publicó un informe en septiembre de 2020 titulado Recomendaciones para eventos y actividades multitudinarias en el contexto de nueva normalidad por Covid-19 en España. En el escrito aparecen detalladas las características de los eventos que se tienen que considerar de alto riesgo. Y el caso de un partido de fútbol cumple con cinco de los nueve requisitos para ser catalogado como alto riesgo.

El plan de LaLiga y el concierto de Barcelona

"Es cierto que en un partido de fútbol se congregaría a muchísimos aficionados, pero también es cierto que los protocolos que tenemos preparados desde hace meses son idóneos para que la vuelta de los aficionados sea segura", indica no obstante el director de Relaciones Institucionales de LaLiga, Roberto Bermúdez de Castro.

"Estamos a la espera de la decisión que se tome, pero estamos preparados para que la vuelta sea en el menor plazo posible, más aún viendo la evolución de la pandemia y la afluencia de aficionados a algunos otros deportes o eventos multitudinarios", añade a este periódico Bermúdez de Castro.

Desde LaLiga ponen como ejemplo el concierto que se celebrará el 27 de marzo en el Palau de Sant Jordi de Barcelona con 5.000 personas sin distancias sociales. Será un experimento y los asistentes deberán haber pasado unas pruebas previas de antígenos y tendrán que llevar la mascarilla en todo momento, aunque podrán interactuar entre ellos. Si sale bien, será otra razón para ver pronto las gradas del fútbol con público.

¿Cuándo? Ésa es la pregunta del millón. "De momento no hay ninguna fecha confirmada", señala el director de Relaciones Institucionales de LaLiga. "Nos encantaría poder volver a ver a gente en los estadios en las últimas jornadas de la presente temporada, pero todo depende de la evolución de la pandemia y de la autorización que nos den las autoridades sanitarias".