Este domingo el mundo de la comunicación y el deporte se despidió de Pepe Domingo Castaño a los 80 años de edad. El famoso presentador de radio y televisión sufrió una septicemia que le provocó un fallo multiorgánico y como consecuencia su muerte. Falleció en torno a las 2:00 de la madrugada en el Hospital de la Zarzuela de Madrid.

Según afirmó la periodista Cristina López Schlichting en su programa matutino de la Cadena COPE, Castaño sufría una infección de garganta persistente que no terminaba de curarse. Tras resistirse a los antibióticos, la infección empeoró y fue ingresado en el hospital madrileño. A todo ello se sumó una infección intestinal que padecía el periodista. 

La condición de salud del presentador de Tiempo de juego de la Cadena COPE empeoró en muy poco tiempo. Con una noticia tan inesperada de su muerte, muchos de los ciudadanos se harán la misma pregunta: ¿qué es la septicemia?

La septicemia causa 11 millones de muertes en el planeta

Se trata de una afección grave en la que el cuerpo responde de manera incorrecta a una infección. Como consecuencia, los procesos que combaten infecciones al activarse en el cuerpo, provocan que los órganos no funcionen correctamente. El descontrol y el daño en los tejidos y órganos, puede causar un choque séptico

“La septicemia puede avanzar y convertirse en un choque séptico. Esta es una disminución considerable en la presión arterial que puede dañar los pulmones, los riñones, el hígado y otros órganos. Cuando el daño es grave, puede llevar a la muerte”, explica el centro médico académico Mayo Clinic.

Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta enfermedad es responsable de ocasionar la muerte de 11 millones de personas cada año en todo el mundo. Por este motivo, se convierte en un problema de salud de gran magnitud a nivel global ya que representa uno de cada cinco fallecimientos en todo el mundo.

Síntomas de la septicemia

El centro médico académico destaca que los efectos que produce la enfermedad pueden variar de una persona a otra por lo que no siempre tiene síntomas específicos. Asimismo, la afección también puede aparecer de forma diferente en los niños y los adultos.

Estos son algunos de los los posibles síntomas que puede causar la septicemia, según Mayo Clinic: 

  • Cambio en el estado mental
  • Respiración superficial y rápida
  • Sudoración sin motivo aparente
  • Aturdimiento
  • Escalofríos
  • Síntomas específicos al tipo de infección, como micción dolorosa cuando hay una infección de las vías urinarias o tos que empeora cuando hay neumonía

En los casos más graves, la septicemia puede convertirse en un choque séptico. Se trata de un descenso abrupto de la presión arterial que aumenta el riesgo de muerte. Algunos síntomas del choque séptico pueden incluir somnolencia profunda, dificultad para permanecer despierto, no poder estar de pie o confusión extrema. 

Factores de riesgo

A su vez, cualquier tipo de infección grave puede derivar en septicemia. Esto incluye infecciones bacterianas, virales o micóticas. Sin embargo, hay un grupo de población que es más sensibles a esta enfermedad por lo que presentan mayores posibilidades de padecerla. 

Según explica la misma plataforma médica, estos son algunos de los factores que aumentan el riesgo de infección que derivarán en septicemia:

  • Personas mayores de 65 años.
  • Personas con menor respuesta inmunitaria, como aquellas que reciben tratamiento por cáncer o personas con el virus de la inmunodeficiencia humana.
  • Personas con enfermedades crónicas, como diabetes, enfermedad renal o enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
  • Ingreso en la unidad de cuidados intensivos u hospitalización más prolongada.
  • Dispositivos que se colocan en el cuerpo, como catéteres en la vena, llamados sonda intravenosa o endotraqueal.
  • Tratamiento con antibióticos en los últimos 90 días.
  • Una afección que requiere tratamiento con corticoides, que pueden reducir tu respuesta inmunitaria.

De esta manera, sabiendo qué es la septicemia y cuáles son sus factores de riesgo, los ciudadanos podrán estar más pendientes de esta afección. En cualquier caso, siempre se recomienda consultar a un profesional médico en caso de experimentar alguno de los síntomas.