La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, explicó al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez su plan para promover un pacto entre las grandes distribuidoras y organizaciones de consumidores al objeto de confeccionar una cesta de alimentos básicos con precios limitados, sin que recibiera ningún tipo de recomendación o instrucción en contra, según ha podido saber El Independiente de fuentes gubernamentales.

La ministra de Trabajo y Economía Social "le clarificó qué propuso y qué no ha propuesto", según indican los mismos medios consultados en alusión a su intención de llegar a una propuesta consensuada y no tanto imponer por ley un tope de los precios, hipótesis que fue tachada de "inconstitucional" por el ministro de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Luis Planas.

Díaz no recibió un mandato explícito de Sánchez para que siguiera adelante, pero "tampoco le dijo que parara", matizan en su entorno. De hecho, en vicepresidencia están convencidos de que, a pesar del aluvión de críticas que ha recibido por parte de varios ministros socialistas, entre ellos, de Nadia Calviño, "si hay acuerdo entre distribuidoras y consumidores, el presidente del Gobierno no lo va a rechazar".

Díaz adelantó su propuesta a un medio de comunicación antes de hablar con Sánchez

Del mismo modo, Díaz habló con Planas, ministro directamente concernido por una propuesta que toca sus competencias de Alimentación y puede colisionar con su Ley de la Cadena Alimentaria, que impide la venta a pérdidas. En todo caso, las explicaciones fueron sobrevenidas puesto que las ofreció, tanto a uno como a otro, tras la entrevista concedida a eldiario.es, este domingo, medio desde el que lanzó la idea.

Pero también Consumo y hasta Comercio son departamentos afectados por la propuesta de la gallega. Alberto Garzón no sólo se ha sumado entusiásticamente a la misma, sino que ayer participó en el encuentro con el consejero delegado de Carrefour en España, Alexandre de Palmas, y también acudirá a la cita del próximo lunes con representantes de la gran patronal de las distribuidoras.

No estuvo, sin embargo Planas, ni tampoco Reyes Maroto, en calidad de responsable de Comercio. Demasiados callos pisados entre unos ministros socialistas que ayer se sumaron al coro de los descontentos por la unilateralidad de la vicepresidenta segunda y tocar temas que no se consideran de su ámbito de actuación.

Montero afea a Díaz que presentara una propuesta sin consenso previo y creara "falsas expectativas"

Este viernes ha sido la ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero. En entrevista en la Ser, Montero ha acotado los términos del debate y afeado a la vicepresidenta que "cuando una propuesta se pone sobre la mesa tiene que tener consenso", del resto del Gobierno. "Muchas veces se da lugar a interpretaciones muy extremas con lo que ella misma manifestó posteriormente cuál era su voluntad. Ha habido contradicciones y es importante no crear falsas expectativas" ". Eso sí, ha dicho que el objetivo perseguido "es de sentido común", de modo que aquellos que "tienen margen faciliten la vida a los ciudadanos".

"Los bolsillos de los ciudadanos competen a todo el Gobierno", replicó ayer Díaz a las críticas recibidas por su compañeros de gabinete ministerial ante un silente Pedro Sánchez que esperan que encauce del debate "y ponga deberes a los suyos".

De momento, la propuesta de Díaz ha sido desautorizada por Planas y también por la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, y la ministra de Defensa, Margarita Robles, cosa, por otro lado, bastante habitual en estos dos años y medio de convivencia en el Gobierno de coalición. Sólo faltaba Carmen Calvo para ese triunvirato enfrentado al sector morado del Consejo de Ministros.

Echenique ha mostrado su reticencias a la propuesta de Díaz por afectar al pequeño comercio

Desde el Ministerio de Asuntos Económicos consideran que la propuesta puede dañar a las empresas, por lo que ven preferible dejar que funcione la competencia. Y Robles, en una entrevista en Antena3, no se mordió la lengua al acusar a la cabeza de delegación de Unidas Podemos de extralimitarse en sus competencias. «Cuando uno está en un órgano colegiado pues puede tener opiniones particulares, pero hay ministros que son los competentes, que son los que técnicamente saben todo y son los que tienen que tomar las decisiones». También le reprochó que «alguien quiera patrimonializar que está con los más vulnerables».

Ojo. Que también desde Podemos se han lanzado críticas contra la que será, previsiblemente, su cabeza de lista electoral. Y es que después de un frío recibimiento, seguido del apoyo de la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, este jueves fue el portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, el que mostró un entusiasmo perfectamente descriptible con la cesta de la compra. "Leo lo de Carrefour y no puedo evitar pensar en qué va a pasar con la frutería o la carnicería del barrio", escribió en Twitter.

Pero Díaz no cejará en su empeño. Cree que este es un debate que se abrirá camino. Y como pasó con la reforma laboral, la pelota caerá de su lado después de un enfrentamiento a cara de perro con Calviño y Sánchez interviniera a favor de la gallega para poner paz. Bien es cierto que necesita que la cita del lunes con la patronal de las grandes superficies le salga bien y logre abrir una brecha entre el bancada socialista del Ejecutivo, pero no sólo.