Seis detenidos y 1,5 toneladas de cable robado recuperadas en dos ciudades

La Guardia Civil ha desarticulado una red criminal dedicada al robo de cable de cobre en las provincias de Ciudad Real y Zaragoza, con la detención de seis personas y la recuperación de 1,5 toneladas de material sustraído. Según informa EFE, la operación, denominada «Flower-man», se desarrolló tras detectarse un aumento de robos en plantas fotovoltaicas, explotaciones agrícolas y alumbrado público durante el primer trimestre de 2025. Los daños económicos para los municipios afectados superan los 53.000 euros.

La investigación, liderada por el Área de Investigación del Puesto Principal de la Guardia Civil de Manzanares, identificó a varios vecinos de esta localidad con antecedentes policiales por delitos similares. En una primera fase, se localizó un almacén en Manzanares donde tres de los investigados ocultaban 760 kilogramos de cable de cobre, procedente de una planta fotovoltaica en construcción en Plasencia de Jalón (Zaragoza). El material iba a ser quemado para eliminar su trazabilidad y facilitar su venta en plantas recuperadoras.

Posteriormente, un segundo grupo actuó entre marzo y abril, robando cableado de alumbrado público en Manzanares, Valdepeñas y Daimiel. Los agentes documentaron un modus operandi nocturno: los ladrones cortaban el cable, lo trasladaban a zonas ocultas para quemarlo y luego lo comercializaban. La operación culminó con la detención in fraganti de tres individuos en Daimiel, donde sustrajeron 750 metros lineales de cable (480 kg) de tres barrios, dejándolos sin alumbrado. En total, se intervinieron 1,5 toneladas de cobre, herramientas de corte y material ya procesado.

Los arrestados, vinculados a una planta recuperadora de Manzanares, enfrentan cargos por 12 delitos de robo con fuerza y 3 hurtos. Las diligencias judiciales han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Manzanares. Este operativo refleja la escalada de robos de metales en España, impulsada por su alto valor en el mercado negro, y subraya la necesidad de reforzar la seguridad en infraestructuras críticas.