Puede que el debate siga reverberando unos días, o semanas. Y no es nuevo. Es la pregunta al PSOE de por qué no facilita con su abstención la investidura de un dirigente del PP si realmente quiere evitar que dependa de Vox. Pero ese dilema la Moncloa, Ferraz y las federaciones lo tienen resuelto desde hace años: la respuesta es un no. Pero este lunes lo suscitó un representante de la vieja guardia socialista, el expresidente Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y lo hizo en la reunión a puerta cerrada de la ejecutiva del partido en Extremadura, en la que el barón regional y candidato a la Junta, Miguel Ángel Gallardo, comunicó su dimisión del cargo (aunque no de su escaño). Su llamada a salir al auxilio de María Guardiola no la compartió ni el propio Gallardo, ni tampoco los críticos de este. La dirección de Pedro Sánchez también rechaza esa idea, igual que su Ejecutivo.
Elma Saiz, la titular de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, se estrenó este martes como nueva portavoz del Gobierno tras la última reunión del Consejo de Ministros de este 2025. Y ella trasladó esa negativa oficial. "Fue el Partido Popular quien decidió de manera innecesaria esta convocatoria electoral", la de las autonómicas extremeñas del 21 de diciembre, "así es que responsabilidad hay que pedir al responsable y en este caso tiene nombres y apellidos y es el Partido Popular del señor [Alberto Núñez] Feijóo y de la señora [María] Guardiola", sostuvo.
Es decir, que no se puede pedir al PSOE que sea "responsable" y salve a la presidenta de la Junta de las garras de Vox, porque fue ella, de manera coordinada con el líder del PP, quien optó por anticipar los comicios en busca de una mayoría absoluta que no consiguió. Guardiola consiguió el domingo 29 escaños, uno más de los que tenía pero a cuatro de la mayoría absoluta. Vox más que duplicó su representación, al saltar de cinco a 11 escaños. El PSOE de Gallardó tocó fondo y se hundió (de 28 a 18 diputados) y Unidas por Extremadura —suma de Podemos a IU—, mejoró su dato, al pasar de cuatro a siete representantes.
Responsabilidad hay que pedir al responsable y en este caso tiene nombres y apellidos y es el Partido Popular de Feijóo y Guardiola", señala Saiz
Saiz manifestó su "máximo respeto" a lo expresado por los extremeños en un convocatoria electoral que eran "prerrogativa" exclusiva de la presidenta de la Junta. Admitió que como demócrata la "duele" la participación tan baja de estos comicios, del 62,73%, 7,62 puntos menos que en los de mayo de 2023, y le "duele" que Vox haya duplicado su presencia en la Asamblea regional. Pero el PP buscaba "desprenderse" de la ultraderecha "y lo que ha conseguido es "estar más atado que nunca" a ella. "Por eso apelo a la responsabilidad de todas las fuerzas políticas en el sentido de preservar de la presencia en las instituciones de aquellos que quieren acabar con las instituciones", aseguró.
De esas palabras podía colegirse que al menos los socialistas no cerraban la puerta a la abstención a Guardiola. Pero no era así. La propia portavoz aclaró justo después, tras una nueva pregunta de los informadores, que la "responsabilidad" hay que pedírsela a quien convocó de manera "innecesaria" estas elecciones. En suma, que el PP debe salir del laberinto en el que él solo se metió.
La portavoz recuerda que no solo se trata de que el PP pacte con Vox, es que también lleva a cabo "políticas" de la ultraderecha y "mensajes de la ultraderecha". El ejemplo: el desalojo de Badalona
Saiz añadió otro apunte relevante: no se trata solo de la investidura. El PP, insistió, "no solo está pactando con la ultraderecha, está llevando a cabo políticas de ultraderecha, mensajes de ultraderecha". Dicho de otro modo, que el PP no solo pacta y acuerda con Vox, es que asume "en primera persona" políticas y discursos de la ultraderecha, como sucede con la inmigración. Recordó la dirigente navarra, en ese sentido, el desalojo, la semana pasada, del instituto B9 en Badalona (Barcelona) ordenado por el alcalde de la localidad, el popular Xavier García Albiol, que ha dejado en la calle a 400 personas, en su mayoría inmigrantes subsaharianos. Una acción de gobierno que, para el Ejecutivo de Sánchez, es "un ejercicio claro de racismo, xenofobia y deshumanización".
La portavoz indicó que aunque la cuestión de facilitar los gobiernos al PP vía abstención está "resuelta" en los órganos del PSOE, es la "militancia la que tiene la voz". Porque, y así consta en los estatutos federales del partido, son las bases las que tendrían la última palabra.
En el Ejecutivo se retrotraen a lo que ocurrió tras las extremeñas de mayo de 2023: Vara ganó, pero Guardiola, empatada en escaños con él, se negó a facilitarle la investidura y optó por irse con Vox
Fuentes del Ejecutivo reiteran que la puerta a la abstencióne está "cerrada". "Es que es una irresponsabilidad la del PP, que ha decidido encadenar elecciones autonómicas [el 8 de febrero llegarán las urnas a Aragón; en marzo, a Castilla y León, y en primavera, a Andalucía] para desgastar al Gobierno, y eso acaba provocando la mayor presencia de la ultraderecha. Guardiola convocó estos comicios porque no tenía presupuestos, pero es que la negociación que se abra ahora va a ser peor que la que habría tenido", justifican. También en la Moncloa se preguntan si realmente el PP quiere la ayuda del PSOE, porque ese gesto solo serviría de combustible para Vox. En el Gobierno recuerdan que en 2023 fue Guillermo Fernández Vara, fallecido el pasado octubre, quien pidió la abstención al PP, y no se la dio. Y el PSOE era entonces la fuerza más votada, aunque empatada en escaños (28) con Guardiola.
Lo que es evidente es que la estrategia socialista no funcionó el 21-D. Los resultados no son los que "se esperaban, evidentemente", pero sí cree el Gobierno que está "en su mano" que cambien. El análisis que hace el Ejecutivo, y que expuso Saiz, es que en aquellas comunidades autónomas donde el PP ha pactado con Vox "quizá sus ciudadanos todavía no están sufriendo las consecuencias" de esos gobiernos. Y no sufren "las consecuencias de esa involución, de esos recortes que plantean" porque "hay un Gobierno de España que está siendo una garantía para proteger esos derechos de la ciudadanía, esos servicios públicos".
Si los ciudadanos de las CCAA con pactos de PP y Vox no ven "las consecuencias de esa involución y esos recortes" es porque "el Gobierno de España está siendo garantía" de derechos y servicios, dice
La portavoz puso como ejemplos la limitación del derecho al aborto en las comunidades del PP, o que se deje "morir" los servicios públicos, o se "niegue la violencia machista" cuando en lo que va de año ya son 47 las mujeres asesinadas. Los resultados de esas políticas, en definitiva, no son percibidos por los ciudadanos porque el Gobierno de Sánchez actúa de red, de soporte. Saiz puso como prueba los dos reales decretos leyes aprobados este martes: el de prórroga del escudo social (con medidas como la revalorización de las pensiones, la moratoria antidesahucios o la prolongación del bono social eléctrico) y el de mantenimiento de las ayudas al transporte y aprobación del abono único.
"No está viendo la ciudadanía las consecuencias de esas políticas de involución del PP y Vox, pero desde luego el Gobierno y yo como portavoz nos vamos a seguir dejando la piel para seguir demostrando que no da igual quién esté al frente de las de las instituciones y de los gobiernos", concluyó.
Te puede interesar
Lo más visto
Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registrado