La selección de Estados Unidos, vigente campeona del mundo, quedó eliminada del Mundial femenino de fútbol de Australia y Nueva Zelanda después de caer en penaltis ante Suecia. Una de las reacciones más sonadas ha sido la de Donald Trump que aprovechó la ocasión para criticar la gestión de Joe Biden y para ajustar cuentas con Megan Rapinoe. La futbolista, que falló un penalti, criticó en 2019 a Trump por excluir en su mensaje a LGTBI.

«Tu mensaje excluye a gente que se parece a mí», denunció entonces la estrella de la selección de Estados Unidos cuando Donald Trump todavía era presidente del país norteamericano.

Fiel defensora de los derechos del colectivo LGTBI, Megan Rapinoe añadió: «Tenemos el pelo rosa y morado, tatuajes y rastas, tenemos chicas blancas y negras, heterosexuales y gays».

Cuatro años después, tras la derrota de Estados Unidos frente a Suecia, Donald Trump ha aprovechado la ocasión para ajustar cuentas con Megan Rapinoe. «Buen tiro Megan, ¡¡¡EE.UU. se va al infierno!!!», fue el mensaje que le dedicó.

«La derrota 'impactante y totalmente inesperada' del equipo de fútbol femenino de EE.UU. ante Suecia es totalmente emblemática de lo que le está sucediendo a nuestra gran nación bajo el mando de Joe Biden. Muchas de nuestras jugadoras eran abiertamente hostiles a Estados Unidos. Ningún otro país se comportó de esa manera, ni siquiera parecido. DESPERTAR ES IGUAL A FRACASO», agregó.

La derrota de Estados Unidos que propició la reacción de Donald Trump

Estados Unidos, que había sido semifinalista en todas las citas mundialistas celebradas hasta el momento y que acumula cuatro títulos (1991, 1999, 2015 y 2019), se vio sorprendida por Suecia, terceras en Francia 2019.

Tras el empate sin goles en el tiempo reglamentario y después de que el marcador no se moviese en la prórroga, el choque se decidió desde los once metros. Las dos primeras jugadoras suecas y las tres primeras estadounidenses no erraron sus lanzamientos, hasta que llegó el fallo de Nathalie Bjorn. Megan Rapinoe, Balón de Oro en 2019, también envió el balón fuera, y ni Rebecka Blomqvist ni Sophia Smith aprovecharon su oportunidad de poner en ventaja a su equipo. Hanna Bennison sí adelantó a Suecia, y la guardameta Alyssa Naeher respondía con seguridad.

El drama de la selección norteamericana empezó a gestarse cuando Kelley O'Hara, en el séptimo lanzamiento, topó con el palo. Lina Hurtig tenía ante sí la ocasión de eliminar a la campeona, y a pesar de Naeher adivinó el lanzamiento, el esférico superó la línea de gol y el tanto subió al marcador, tras varios instantes de incertidumbre y con la ayuda del VAR.