La banca italiana abre la semana bursátil con buen tono. El rescate de los bancos Popolare di Vicenza y Veneto Banca ha sido recibido con alivio por el sector financiero trasalpino, que firma este lunes sus mayores ganancias en dos meses.

Un repunte que está liderado por Intesa Sanpaolo. El mayor banco del país por capitalización bursátil suma cerca de un 4% tras anunciar la adquisición del negocio sano de las dos entidades intervenidas.

Intesa precisó este lunes que ha obtenido la autorización unánime por parte de su consejo de administración para comprar, "por el precio simbólico de un euro", ciertos activos y pasivos de los bancos vénetos. De acuerdo con la propia entidad, su intervención protege "el empleo de las personas que trabajan" en las entidades rescatadas, así como "los ahorros de cerca de 2 millones de familias y la actividad de casi 200.000 empresas financiadas".

El acuerdo ha sido bien valorado por los analistas. "Intesa Sanpaolo ha logrado acordar una transacción favorable para el rescate de los dos bancos, con gran apoyo del Estado, compensando la mayoría de los riesgos potenciales que podrían derivarse del acuerdo", observan en Citi.

Intesa suma más del 4% en bolsa tras comprar ambos bancos por un euro

Su buen tono se extiende al resto del sector. Banco BPM, Ubi Banca, UniCredit, Mediobanca y Popolare Emilia Romagna registran igualmente repuntes superiores al 3%.

El sector bancario italiano celebra de este modo el decidido apoyo del Gobierno a la reestructuración del sector, plasmado en esta ocasión con el empleo de cerca de 17.000 millones de euros de dinero público -4.875 millones en ayudas más 12.000 millones en garantías- para ejecutar la limpieza del balance de los bancos intervenidos, al tiempo que traspasa a Intesa Sanpaolo el negocio saneado.

La reciente liquidación de Popular, que se ejecutó sin empleo de fondos públicos, provocando que los accionistas y buena parte de los bonistas perdieran toda su inversión, había generado ciertas tensiones entre los inversores, que temían que las entidades italianas en dificultades corrieran la misma suerte. Esto había provocado un descenso del índice sectorial italiano superior al 5% en el último mes.

Sin embargo, una vez más, el Gobierno italiano ha encontrado la vía para poder emplear dinero público en el saneamiento de su sector, a pesar de las restricciones que impone la nueva normativa europea de resolución bancaria, que tiene como fin evitar que sean los contribuyentes los que tengan que financiar los rescates de las entidades financieras en problemas.

Ya a finales del pasado año, Italia tuvo que afrontar la intervención del banco Monte dei Paschi di Siena. También entonces, las autoridades trasalpinas diseñaron un plan de rescate público, sorteando los recelos de las autoridades europeas.

Desde entonces, el sector financiero italiano ha celebrado en bolsa el comprometido apoyo de su gobierno. Los bancos englobados en el índice Ftse Mib All Share Banks acumulan de media ganancias superiores al 15%, desde el inicio de 2017.

El sector financiero italiano se encuentra en el foco de las tensiones desde hace varios trimestres, afectado por una enorme pila de activos de baja calidad, cifrados en más de 300.000 millones de euros.