El primer discurso ante la Cámara de Representantes de Jerome Powell, el flamante nuevo Presidente de la Reserva Federal, se ha configurado como un soporte para la divisa americana, muy a pesar del presidente de EEUU, Donald Trump, que seguramente se arrepiente de no haber renovado el mandato a Janet Yellen

Si por estas fechas el pasado año recomendábamos en esta misma columna cautela con el dólar por la elevada volatilidad que se había incorporado en su cotización fruto de las declaraciones del presidente Donald Trump dispuesto a depreciar su divisa a toda costa, hoy pensamos que el dólar después de haberse depreciado más de un 15 por ciento desde entonces, tiene claras posibilidades para cambiar su sesgo y apreciarse frente al euro.

La primera comparecencia ante el Congreso de EEUU, Jerome Powell, el nuevo presidente de la Reserva Federal (Fed) ha mostrado un tono más restrictivo en cuanto a la política monetaria que el que los mercados esperaban. Así, los mercados descuentan hoy cuatro subidas de tipos en 2018 frente a las dos o tres que se descontaban antes de su comparecencia.

Ni en sus peores sueños Trump se habría encontrado con que la Fed iba a mostrar su independencia de la Casa Blanca

Ello ha supuesto un estímulo para un dólar que no encontraba soporte frente al euro, presionado por los desequilibrios de la economía americana (déficit comercial y déficit fiscal) y también por una administración decidida a aplicar su Americafirst también a la divisa, algo poco ortodoxo y que algunos analistas han calificado como guerra de divisas encubierta. Ni en sus peores sueños Donald Trump se habría encontrado con que el presidente de la Fed que él ha nombrado, en sustitución de Yellen, iba a hacer desde el principio tal demostración de independencia del banco central frente a las políticas de la Casa Blanca.

El índice de Paridad del Poder de Compra se basa en la teoría de que, en el largo plazo, el precio de una cesta de bienes debería ser el mismo en distintos países una vez ajustados por la inflación y los tipos de interés. Según esta teoría el tipo de equilibrio estaría en torno al 1,22 dólares frente al euro, es decir, en unos niveles similares a los alcanzados tras la comparecencia de Powell. Por lo tanto, según esta teoría la cotización actual estaría en su nivel de equilibrio.

Los tipos de interés serán el principal factor que determinará el comportamiento de la divisa por lo que debería tender a apreciarse

Sin embargo, son los diferenciales de tipos de interés que atraen capital la principal fuerza directora en el movimiento de las divisas, por lo que el diferencial de tipos entre dos economías debería ser el principal agente director del tipo de cambio.

Esta correlación en el diferencial entre el bono a 10 años americano y el alemán y la evolución de la cotización del dólar-euro se ha mantenido hasta principios de 2017 durante los últimos años de recuperación tras la crisis financiera. Sin embargo, desde marzo de 2017, se ha producido una relevante divergencia entre ambos: mientras que el diferencial de tipos se incrementaba, el dólar se ha depreciado.

Algunos análisis apuntan a la zona de 1,10 dólares/euros como el nivel que se correspondería con el actual diferencial entre los tipos a largo plazo de EEUU y Europa. Por tanto, y aunque hay elementos que apoyan un dólar débil (desequilibrios estructurales de la economía americana: doble déficit, comercial y fiscal y las políticas de expansión de gasto público de Trump), pensamos que los tipos de interés serán el principal factor que determinará el comportamiento de la divisa por lo que el dólar debería tender a apreciarse desde los niveles actuales, lo que, con mucha probabilidad, sería un elemento negativo para el comportamiento de los activos de riesgo (bolsa, crédito…).


Juan Jesús Gómez Cubillo es socio y director de Consilio Asesores Patrimoniales.