La guerra de Donald Trump contra Amazon sube en intensidad. El presidente estadounidense ha puesto bajo su objetivo al gigante del comercio electrónico, provocando una desbandada de los inversores.

Trump ha lanzado este lunes un nuevo mensaje a través de su perfil en Twitter en el que deja entrever su intención de poner en marcha medidas para poner coto al negocio de la compañía que dirige Jeff Bezos.

"Sólo los tontos, o algo peor, están diciendo que nuestro deficitario Servicio de Correos hace dinero con Amazon. Pierden una fortuna y esto se cambiará. Además, nuestros minoristas que pagan todos sus impuestos están cerrando tiendas por todo el país...este no es un campo de juego nivelado", ha escrito en la red social.

Esta amenaza pesaba como una losa este lunes sobre la evolución de Amazon en Wall Street. Sus acciones firmaban en las primeras horas de negociación descensos en el entorno del 5%, en lo que supone su mayor tropiezo desde 2016.

La compañía acumula una pérdida superior al 11% en las últimas cuatro sesiones, a medida que el mercado ha ido percibiendo el riesgo de que Trump ponga en marcha medidas para endurecer el tratamiento fiscal que recibe Amazon. Ha liquidado, de este modo, más de 85.000 millones de dólares de valoración bursátil.

De este modo, el grupo de comercio electrónico resta lustre a su brillante evolución en los últimos tiempos, que le había llevado recientemente a convertirse en la segunda mayor cotizada del mundo.

Un enfrentamiento que viene de lejos

Fuentes conocedoras de las intenciones del presidente estadounidense detallaban recientemente al portal tecnológico Axios que Trump está obsesionado con frenar a Amazon, al considerar que mata el comercio tradicional y destruye miles de empleos.

Y el pasado jueves el propio Trump dejó patentes sus preoacupaciones al señalar en Twitter que "he expresado mis preocupaciones sobre Amazon mucho antes de las elecciones. A diferencia e otros, ellos pagan poco o ningún impuesto a los gobiernos estatales y locales, utilizan nuestro sistema postal como su chico de reparto (causando una tremenda pérdida a los Estados Unidos), y están conduciendo a muchos miles de minoristas hacia la quiebra".

Dos días después, Trump volvía a dedicar una serie de mensajes a Amazon -y al Washington Post, propiedad de Bezos-, denunciando las millonarias pérdidas que genera el Servicio Postal estadounidense. "Amazon debe pagar los costes reales (y los impuestos) ahora", señalaba.

La posibilidad de que la Casa Blanca esté pergeñando un plan anti Amazon supone una seria amenaza para una compañía que ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años, abordando diversos tipos de negocios, incluyendo alimentación o salud, amén de sus tradicional negocio de comercio electrónico. Un informe de Citigroup cifraba hace un año en 2.600 millones de dólares el coste que representaría para Amazon un incremento de las tarifas postales.

Trump ha dejado patente en múltiples ocasiones su animadversión hacia Bezos, al que considera, a través del diario Washington Post, uno de los principales impulsores de noticias falsas en su contra.