Banco Santander cerró el primer semestre de 2019 con un beneficio de 3.231 millones de euros, un 14% menos que en el mismo periodo, tras reducir sus ganancias entre abril y junio un 18%, hasta los 1.391 millones.

La entidad presidida por Ana Botín sufrió esta merma de su resultado tras asumir unos cargos por provisiones de 814 millones de euros (706 de ellos en el segundo trimestre), asociados en su mayoría a los recortes de plantilla anunciados por el banco en los últimos meses y que han supuesto la salida de unos 3.223 empleados.

Desde el banco subrayan que sin estos cargos extraordinarios, el beneficio hasta junio habría alcanzado los 4.045 millones, en línea con lo obtenido en el mismo periodo del año anterior y un 2% por encima a tipos de cambio constantes.

El negocio en Brasil crece un 18% en el semestre y representa el 29% del beneficio ordinario total

Este resultado estuvo apoyado en la buena evolución del negocio en Brasil, que mejoró su beneficio ordinario un 18% y ya representa un 29% del total. Mayor fue el crecimiento en Estados Unidos, donde las ganancias aumentaron un 30%, hasta los 465 millones, superando el resultado de México, pese a que creció un 12%. España, con 694 millones de ganancias ordinarias, se mantuvo como el segundo mayor mercado del banco, tras crecer un 5%.

Santander explica que, de las dotaciones anunciadas, 600 millones se corresponden a los costes de reestructuración en España y 26 a los de Reino Unido. Asimismo, detallan que otros 80 millones están ligados a seguros de protección de pago en Reino Unido. Los restantes 108 millones fueron anunciados en el primer trimestre.

Más allá de esto, el mayor banco español por valor de mercado resalta el crecimiento de su margen de intereses, hasta los 17.636 millones de euros, un 4% más que en el mismo periodo del año anterior. También crecieron el crédito y los recursos de los clientes, un 4 y un 6%, respectivamente, una vez excluido el impacto de los tipos de cambio.

Con todo esto, Santander ha elevado en un millón su número de clientes, que alcanza ya los 142 millones, lo que le convierte en el banco más grande de Europa y América, según afirma la propia entidad. De estos clientes, 67 millones están localizados en Europa, 52 en Sudamérica y 22 en Norteamérica. Unos 20,6 millones usan Santander como su banco principal.

La ratio de capital CET1 ha mejorado hasta el 11,3%, cumpliendo con los objetivos de la entidad

Entre otros parámetros, el banco que preside Ana Botín ha querido poner en valor la mejora de su calidad crediticia, reflejada en la caída de la tasa de morosidad hasta el 3,51%, 11 puntos básicos menos. Idéntica mejora refleja la ratio de capital CET1, que alcanzó el 11,3%, en línea con el objetivo a medio plazo del banco de situarlo entre el 11 y el 12%.

Del mismo modo, Santander pudo defender la buena evolución de su rentabilidad y de su eficiencia; el retorno sobre el capital tangible (RoTE) ordinario se situó en el 11,7%, algo por debajo del 12,24% del mismo periodo del año anterior, mientras que la ratio de eficiencia (costes frente a ingresos) mejoró un punto básico, hasta 47,4%.

"Partimos de una posición excepcional para seguir creciendo de forma rentable y estoy convencida de que lograremos los objetivos que nos pusimos en el investor day, entre ellos alcanzar un RoTE del 13-15% a medio plazo", ha señalado Ana Botín a través de una nota distribuida por la entidad, en la que se pone en valor los avances del banco en su transformación digital (los accesos a las plataformas móviles o digitales del banco han crecido un 28% en el último año.