El cobro a los clientes por guardar su dinero en el banco sigue ganando terreno en España. El escenario de tipos de interés en negativo, que penaliza los márgenes del sector a través de diversas vías, ha llevado a las entidades a estudiar fórmulas para traspasar a sus clientes, al menos, parte de estos costes.

En este contexto, Openbank ha comenzado a anunciar a sus clientes que sean personas jurídicas que a partir del próximo mes de febrero comenzará a aplicarles una comisión de mantenimiento de 5 euros al mes por sus cuentas corrientes, según ha podido saber El Independiente. Desde el banco digital del Grupo Santander defienden que esta medida afectará a muy pocos clientes, ya que la gran mayoría de los clientes de la entidad son personas físicas, que no se verán afectados por esta comisión.

El cobro a los particulares, pues, se mantiene como una línea roja para el sector en España -aunque en Europa son ya varias las entidades que han tomado medidas de este tipo-, que, sin embargo, ha ido paulatinamente ampliando el espectro de clientes afectados por el cobro de tasas sobre sus fondos.

La entidad asegura que la gran mayoría de sus clientes, que son particulares, no se verán afectados

Tras un primer periodo de negativa absoluta, los bancos comenzaron a aplicar un cobro por los depósitos a las cuentas más grandes, para poco a poco ir bajando el listón. El pasado octubre, Bankia daba el paso de trasladar esos cobros también a clientes institucionales de banca privada y según publicaba recientemente Expansión algunas firmas de este segmento ya estaban aplicando cargos a particulares con cuentas abultadas.

En este sentido, el consejero delegado de Banco Sabadell, Jaume Guardiola, uno de los que más claramente ha dejado abierta la puerta a la posibilidad de que se llegue a cobrar por los depósitos de particulares, indicaba el pasado octubre que los límites de esta política vendrán marcados por las dinámicas competitivas.

La medida de Openbank, que no contempla a priori excepciones, sería aplicable, por lo tanto, a cualquier empresa, sociedad o asociación, con independencia de los fondos que tengan depositados en sus cuentas. De hecho, la medida del banco digital no supone una tasa sobre los depósitos, sino una comisión de mantenimiento, pero su justificación resulta idéntica.

No en vano, las comisiones son una de las palancas que más están utilizando los bancos en los últimos tiempos para hacer frente a la debilidad de los ingresos motivada por el escenario de tipos de interés en negativo, y ya representan el 30% del margen bruto del sector.

La división de Santander en la que se integra Openbank perdió 77 millones hasta el tercer trimestre

El paso dado por la entidad que dirige Ezequiel Szafir se produce pocos días después de que el diario El Economista publicara que se está planteando también cercenar la remuneración que ofrece por su cuenta ahorro y sus depósitos, siguiendo los pasos seguidos por su matriz, que recientemente decidió cancelar la remuneración y bonificaciones de su Cuenta 1,2,3.

Openbank, que actualmente se encuentra en pleno proceso de internacionalización, tras su salto a Alemania y su desembarco en Holanda, contaba al cierre del tercer trimestre con 1,2 millones de clientes -los mismos que al cierre del trimestre anterior.

La entidad se encuentra englobada desde el segundo trimestre en la división de negocios digitales del banco, Santander Global Platform, que acumula en los nueve primeros meses del año unas pérdidas de 77 millones de euros, frente a los 32 millones registrados el año anterior.

En esta división, el volumen de créditos, de 596 millones de euros, es más de 15 veces inferior al monto de depósitos de la clientela, que ronda los 9.200 millones, un desequilibrio que resulta especialmente perjudicial para sus cuentas en el entorno actual, en el que los bancos deben abonar al Banco Central Europeo (BCE) una tasa del 0,5% por sus excedentes de liquidez.