El presidente de la patronal hotelera Hosbec, Toni Mayor, ha manifestado a EFE que el aplazamiento de las fiestas de las Fallas de Valencia y la Magdalena de Castellón por el coronavirus "destrozará la cuenta de resultados" de 2020 de los hoteles de ciudades como Valencia, porque además "llueve sobre mojado".

Tras conocerse la decisión adoptada por el Gobierno valenciano de aplazar las fiestas, el presidente de la Asociación Empresarial Hotelera de Benidorm, Costa Blanca y Comunidad Valenciana ha admitido que es una situación "excepcional" que no habían vivido nunca, aunque espera que se supere en unos meses y el verano sea "tranquilo".

Mayor ha comparado la repercusión del aplazamiento de las Fallas de Valencia con la suspensión del congreso Mobile de Barcelona, y ha destacado que esta decisión llega después de que se hayan suspendido numerosos congresos y eventos, además del programa del Imserso: "esto es un llover sin parar, es peor que la Dana de septiembre económicamente hablando".

Ha augurado que el impacto económico en los hoteles de este aplazamiento será "fuerte", aunque espera que los establecimientos de la costa lo sufran menos y que en un par de meses se pueda "recomponer" la situación, gracias al turismo nacional y el internacional.

El presidente de Hosbec ha afirmado que cuando los políticos toman medidas "impopulares y dramáticas" como esta es que habrá motivos para ello, y ha opinado que algunos hoteles tendrán que cerrar temporalmente y por ejemplo volver a abrir para Semana Santa, pues "son muchas las camas" existentes.

Mayor ha explicado que el beneficio de los hoteles de la costa española se produce de mayo a octubre, por lo que si para el 15 de mayo pudiera estar resuelta la situación podrían remontar, y ha agregado que ahora tienen que intentar ser capaces de captar la demanda existente para esas fechas.