El apagón económico sigue hundiendo en el consumo de electricidad en España, un baremo que sirve para medir la actividad de un país. Las restricciones del estado de alarma y el parón empresarial para todas las actividades que no sean esenciales está hundiendo la demanda eléctrica que ya se sitúa en niveles que no se registraban desde los últimos estertores de la Gran Recesión.

Durante la pasada semana el consumo peninsular de electricidad fue de 3.854 gigavatios hora (GWh), lo que supone un descenso del 8,6% en relación a la semana anterior –cuando ya estaba plenamente en vigor el estado de alarma- y un 17,6% por debajo de la última semana sin restricciones a la movilidad en todo el país, según los registros de Red Eléctrica de España (REE), operador del sistema eléctrico y gestor de la red de alta tensión.

Pero, además, la demanda eléctrica de la semana pasada supone el menor registro desde 2013, el último año de la crisis económica en España. Entonces la economía aún seguía cayendo, en la segunda recesión en un lustro, y se seguía destruyendo empleo. En concreto, este consumo de electricidad tan bajo no se registraba desde la Semana Santa de aquel año, cuando las vacaciones reducen la demanda por la menor actividad económica, según datos de REE a los que ha tenido acceso El Independiente.

Además del menor consumo por el parón empresarial,  también se está registrando un cambio en el modo de consumir que se refleja en que los descensos no se dejan notar igual a lo largo de cada jornada. Las caídas son muy distintas en función de la hora del día: las mayores caídas se concentran por las mañanas como reflejo del apagón económico provocado por la crisis sanitaria y las restricciones, mientras que por las tardes el consumo es similar al que había antes del estado de alarma.

En la España del #yomequedoencasa, del teletrabajo masivo, y del parón industrial la disminución del consumo de electricidad es notablemente mayor entre las 10.00 y las 14.00 horas, con descensos de hasta el 18% respecto al consumo de un día laborable medio. El pico de demanda de primera hora de la mañana se ha retrasado hasta las 14.00 horas, según un estudio del Centro de Predicción Económica (Ceprede).