Sanidad y Educación han sentado las bases para que a partir de septiembre alumnos y docentes puedan volver a las aulas. Una apuesta por la educación presencial que valoran los sindicatos, pero que deja en el aire varias cuestiones importantes. Entre ellas, la redacción de un Plan de Inicio de Curso y de Planes de Contingencia “que prevean las actuaciones a realizar y los mecanismos de coordinación necesarios para los posibles escenarios que puedan darse”.

En esta línea, el Ministerio de Educación sugiere que “haya una persona responsable de referencia para los aspectos relacionados con la Covid-19”. El departamento que dirige Celáa no da más pistas sobre las responsabilidades y el perfil de esta persona. Preguntada por esta cuestión, la ministra señaló que cada centro tendrá en sus manos elegir al responsable de que se cumplan las medidas higiénicas y sanitarias.

De esta forma, se entiende que Educación pretende que cada colegio elija a una persona del centro para que sea la encargada de la prevención en el colegio, es decir, a alguien de la comunidad educativa. Sin embargo, la responsable de Educación de UGT, Maribel Loranca, explica a este periódico que “no se pueden descargar estas responsabilidades sobre el personal docente”. “Primero, porque no es su competencia y segundo, porque no tienen formación para ello”, justifica. 

En cualquier caso, los sindicatos opinan que esa figura es positiva, pero los docentes exigen que provenga del ámbito sanitario y se abre la puerta a la incorporación de personal de Enfermería. Lo mismo opina Loranca de los planes de contingencia: “Tienen que ser elaborados por técnicos de salud y de prevención de riesgos laborales”.

Presupuesto y recursos

Además, los sindicatos de educación reclaman un presupuesto “ad hoc” para implementar las medidas necesarias para volver a las aulas, además de la mejora de las condiciones laborales de los profesores y el refuerzo de las plantillas. Desde CC.OO. cifran en más de 7.385 millones de euros la partida que haría falta para hacer frente al inicio de curso en la “nueva normalidad”.

Desde el Gobierno también se recomienda “la creación de un equipo, formado por distintos representantes de la comunidad educativa, que garantice que todo el mundo esté informado así como el cumplimiento de los principios”. En este punto, es el sindicato de Enfermería (SATSE) el que critica que no se cuente con enfermeros o enfermeras.

En SATSE consideran que “por conocimientos, competencia y cualificación” los profesionales sanitarios pueden garantizar una mejor respuesta “a las necesidades asistenciales y de prevención y promoción de la salud que existen en todos los centros escolares”.

20 euros por habitante

El sindicato de Enfermería considera que el motivo principal por el que no se opta por incorporar al menos a un enfermero a cada centro es el coste. Sin embargo, estiman que se trata de una inversión “irrisoria” de entre 16 y 20 al año por habitante.

Antes de septiembre, las comunidades autónomas deben afinar los planes de la vuelta al cole. Cuestiones como los ratios de alumnos, la distancia de seguridad y el presupuesto estarán sobre la mesa. De momento, el Gobierno ha anunciado un fondo de 2.000 millones de euros destinado a Educación. Desde los sindicatos, consideran que ahora es el turno de las consejerías autonómicas y esperan un esfuerzo económico por su parte.