El impacto de la crisis del coronavirus sobre el empleo provocará que los desempleados de mayor edad opten por las prejubilaciones. Además, las exoneraciones de las cuotas de la Seguridad Social de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) han reducido los ingresos públicos que se destinan al pago de las pensiones.

Por estos motivos, la OCDE considera que el sistema de pensiones públicos estarán más tensionados después de la crisis del coronavirus. Según el Pensions Outlook 2020, publicado este lunes, la organización cree que "la deuda acumulada añadirá presión a las finanzas de las pensiones, ya tensionadas por los retos demográficos".

En el documento, la OCDE no ofrece un diagnóstico país por país, pero lo cierto es que el diagnóstico general se aplica adecuadamente a España. La economía de nuestro país ha sido de las más perjudicadas a raíz de la pandemia. La tasa de paro alcanza el 16,3% y el número de afectados por un ERTE fue de 3,6 millones de personas en su peor momento.

Ante esta realidad, el Gobierno optó por desplegar un "escudo social" para proteger rentas y contribuir al sostenimiento del tejido productivo. Para ello, se exoneró del pago de las cotizaciones sociales a aquellas empresas que se acogieran a un ERTE. Estas exoneraciones se han reducido en algunos casos, pero lo cierto es que las cuentas de la Seguridad Social se han resentido, por el mayor pago de prestaciones y por la merma en los ingresos.

"Algunas de las medidas pueden amenazar la adecuación de los ingresos futuros, ya que se permitió pausar las contribuciones (a planes de ahorro) o retirar los ahorros para aliviar la situación en el corto plazo", advierte la institución. En el caso de España, se permitió a los afectados por ERTE o a los autónomos con una caída de ingresos vinculada a la pandemia rescatar planes de pensiones.

Precisamente por esta medida, la de retirar los planes de pensiones sin penalización, la OCDE incluye a España entre los países que han puesto en marchas en el corto plazo que pueden suponer riesgos a la larga.

Paro y prejubilaciones

Otro de los aspectos que destaca la OCDE como perjudicial para el sistema de pensiones es el elevado desempleo. "Los trabajadores mayores que hayan perdido su empleo pueden tener dificultades para encontrar trabajo y sentirse tentados a una jubilación anticipada", indica.

En este sentido, cabe señalar que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones tiene la intención de penalizar las prejubilaciones para que la edad efectiva de jubilación se acerque a la edad legal. Sin embargo, el panorama laboral arroja una realidad muy diferente. Un ejemplo significativo es el de la banca, donde se prevén miles de prejubilaciones durante el próximo año.

Las prejubilaciones son perjudiciales para el sistema porque este paga una pensión a un trabajador de forma prematura, antes de que estuviera previsto que se jubilase. Este aspecto, ligado a la próxima jubilación de la generación baby boomer - mucho más numerosa que la anterior- así como una mayor esperanza de vida, hacen que la Seguridad Social busque fórmulas para complementar el sistema público de pensiones. Entre las opciones, priorizar los planes colectivos a los privados.