Este martes el sector energético se movilizaba en masa para hacer pujas en los 3.000 MW de energía verde que se ponían en juego y en el que, según datos que manejan fuentes del sector, Capital Energy ha sido la principal vencedora de las subastas. 

Dichas fuentes confirman a El Independiente que Capital Energy ha conseguido 620 megavatios de energía eólica, por lo que su apuesta por España y Portugal seguirá intacta, mientras que Greenalia ha sumado un total de 135 MW. 

Naturgy, una de las tres grandes empresas del sector, y de acuerdo a cifras estimadas por el sector, Naturgy ha resultado adjudicatario de un total de 235 MW (38 MW eólicos y 197 MW fotovoltaicos) repartidos entre las tecnologías eólica y solar fotovoltaica.

En cuanto a la energía solar, Endesa, a falta de confirmación oficial por parte del Ministerio de Transición Ecológica, se habría llevado un total de 50 MW, mientras que Iberdrola podría haber adquirido un total de 240 MW en fotovoltaica. 

La gran sorpresa ha sido Repsol, que a pesar de lanzar una serie de subastas por primera vez, no ha conseguido entrar en la primera de las subastas que ha puesto en el mercado el Gobierno dirigido por Pedro Sánchez. 

La primera de estas nuevas subastas ponía en juego un cupo objetivo de 3.000 megavatios (MW), de los cuales dos tercios serán copados por la fotovoltaica (1.000 MW) y la eólica terrestre (1.000 MW), quedando el resto de potencia a subastar sin restricción tecnológica.

Condiciones

En las bases de la nueva puja que se celebra este martes, todos los participantes deben presentar proyectos en los que se establezca un plan estratégico. En este debe explicarse el impacto que tendrá en el empleo, en la economía y el valor añadido a la industria de la región escogida para desarrollar la implantación de energía renovable. 

En otro orden de cosas, el Gobierno especificó que la subasta se dividirá en 1.000 MW para la fotovoltaica, otros 1.000 para eólica terrestre y quedarán 1.000 MW liberados de restricción tecnológica, con lo que podrán optar a ellos cualquier tecnología.

En el pliego de condiciones también se indica que el plazo máximo de entrega de la energía renovable pujada debe culminar en 12 años para la tecnología fotovoltaica, solar termoeléctrica, eólica terrestre y marina, e hidroeléctrica y de 15 años para las tecnologías de biomasa, biogás y biolíquidos.