La defensa de Andrea Orcel ya ha iniciado los contactos con el presidente de UBS, Axel Weber, y con el responsable de compensaciones del banco, Mark Shelton, para que acudan presencialmente como testigos al juicio que enfrenta al banquero italiano con el Banco Santander, según ha podido saber este periódico. El juez ha dado cinco días a la defensa para cerrar una fecha en la que ambos directivos puedan estar en el juzgado de Plaza de Castilla, en Madrid.

En la vista oral celebrada este miércoles estuvieron presentes Andrea Orcel, la presidenta del Banco Santander, Ana Botín, en representación del banco y también Roberto di Bernardini, exdirectivo de recursos humanos de la entidad española. No obstante, los representantes de UBS, banco del que hubiera salido Orcel para incorporarse al Santander, no acudieron.

Weber y Shelton habían solicitado testificar por videoconferencia pero el juez les negó esta opción. "Viajan mucho por trabajo", justificó durante la vista oral. En este sentido, emplazó a la defensa a que buscaran fechas próximas para que pudieran viajar a Madrid y ahora tienen cinco días para comunicar su disponibilidad al juez.

"Las agendas de estos perfiles son complicadas", explican las fuentes consultadas, por ello la defensa de Orcel se habría dado prisa en buscar cuanto antes una fecha. Además, ninguna de las partes tiene interés en prolongar este proceso.

De hecho, la negativa del juez a que los testigos de UBS compareciesen sin viajar a Madrid provocó la suspensión de la vista, ya que las pruebas testificales deben hacerse en unidad de acto. Es decir, que los testigos tienen que responder a las preguntas de las partes y del juez en el mismo día. Fuentes jurídicas añaden que la ley española obliga a comparecer ante una citación como testigo.

Próxima fecha

Aunque ya se está en busca de la próxima fecha, se desconoce cuál será finalmente la elegida, por lo que la vista ha quedado suspendida sine die. En la siguiente cita en los tribunales no estará la presidenta del Banco Santander cuyo relato ya escuchó el juez este miércoles.

Se desconoce si asistirá el actual consejero delegado de Unicredit que sí acudió este miércoles aunque no estaba obligado a ello. Fuentes jurídicas apuntan que es una muestra de la importancia que tiene el caso y que de no haber asistido podría ser interpretado por el juez como desinterés.

Orcel demandó al Banco Santander en mayo de 2019 por incumplimiento de contrato tras rechazarse su incorporación como consejero delegado. El banquero reclama a la entidad 76 millones de euros: 17 millones por el bonus de incorporación, 29 por el bonus diferido de UBS, 20 millones por el sueldo que iba a cobrar en Santander durante dos años y 10 millones por daños morales y reputacionales.

Por su parte, la entidad española defiende que el fichaje nunca se confirmó por la Junta de Accionistas y que únicamente se aprobó una carta de oferta sujeta a diversas condiciones. El juez deberá decidir si el documento que firmaron Santander y Orcel tiene validez contractual.