Acuerdo pionero en España para regular las condiciones de trabajo de los repartidores de comida a domicilio conocidos como 'riders'. La empresa Just Eat ha alcanzado un acuerdo colectivo con los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y UGT tras año y medio de conversaciones.

Entre otras cosas, el texto fija un salario base de 8,5 euros por hora, lo que eleva el sueldo medio a 15.200 euros brutos anuales para un repartidor a tiempo completo y sin contar los pluses. "Los salarios de las personas trabajadoras evolucionarán en función al IPC y se fijan salarios claramente por encima del Salario Mínimo Interprofesional", destacan desde los sindicatos.

El acuerdo será de aplicación para los 'riders' que emplea directamente la compañía que dirige Patrik Bergareche. La compañía habla de miles de trabajadores, aunque no da cifras exactas, aunque podría afectar a entre 1.000 y 1.700 empleados.

En cambio, no se verán beneficiados aquellos repartidores que trabajan para compañías de logística especializadas en reparto de última milla a las que Just Eat recurre para cubrir los picos de demanda. Además del salario base, se establecen 30 días de vacaciones, de los que 15 se deben disfrutar entre los meses de junio y agosto y se fija un máximo de 9 horas diarias de trabajo.

Derecho a la desconexión

En otro de los capítulos del acuerdo se regula el derecho a la desconexión digital de los trabajadores para que no reciban comunicaciones fuera de su horario laboral. Además, también se aborda el derecho a la información sobre inteligencia artificial y algoritmos y cómo afecta su funcionamiento a su trabajo. Un extremo que va en sintonía con lo recogido por la denominada 'Ley Rider' que entró en vigor este verano.

Ahora, la aspiración es que el texto sirva de base para otras compañías del sector, con las que los sindicatos mantienen conversaciones. Según Chema Martínez, Secretario General de CCOO Servicios, "sigue habiendo mucha resistencia al reconocimiento de la laboralidad, que es algo básico".

Plataformas como Deliveroo, Glovo o Ubereats siempre se han mostrado muy críticas con la regulación que impulso el Ministerio de Trabajo mediante un añadido al Estatuto de los Trabajadores que va en línea con las sentencias del Tribunal Supremo que condenaron a varias compañías por usar falsos autónomos como repartidores.

El texto será de aplicación en todo el territorio nacional, entrará en vigor el próximo enero. Just Eat opera en 2.700 municipios y cubre el 95% de la población española. También están en poblaciones de menos de 20.000 habitantes y cuenta con 2,5 millones de usuarios y 20.000 restaurantes asociados, que ofrecen más de 100 tipos de comida, incluida la oferta de más de 90 grandes marcas de restauración. "Fuimos pioneros en 2010 -con su llegada a España- y volvemos a ser pioneros ahora", destaca Bergareche.

Entre otras cuestiones, también se recoge que el móvil con el que trabajan los empleados deberá aportarlo la empresa. "Es un acuerdo donde se pueden conciliar todos los intereses y demuestra que hay empresas en nuestro país que quieren hacer las cosas bien", destaca Álvaro Vicioso, secretario de Acción Sindical y Comunicación de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT.

En el texto también se contempla complementos extra por el uso de bicicleta o moto propia, aunque por regla general, es la compañía quien debe suministrarla. Se regula además el cobro de las propinas mensualmente. Según las organizaciones firmantes, el acuerdo pretende la erradicación de la imagen de precariedad en el sector del reparto de comida a domicilio en nuestro país.

No es convenio colectivo

Con el acuerdo se garantiza una jornada efectiva semanal mínima equivalente al 80% del número de horas por semana fijado en el contrato, asegurando en todo caso una jornada mínima y descansos semanales de dos días. De momento no goza de la categoría de convenio colectivo, pues debería ser refrendado por la representación de los trabajadores en la compañía. Algo que, de momento, no existe hasta que se convoquen elecciones sindicales.

A nivel comunitario, la Comisión Europea ha propuso criterios para determinar si los empleados de plataformas digitales son trabajadores de plantilla, para evitar que crezca el fenómeno de los falsos autónomos. "Anticipamos en España lo que se ha convertido en una necesidad en Europa", dice Juana Olmeda, Secretaria General de la Federación de Servicios de Comisiones Obreras.

Bergareche recuerda que el sector genera más de 1.000 millones de euros de facturación en España y tiene "muchísimo potencial de crecimiento". "Durante la pandemia", ha remarcado, sirvió de "salvavidas para miles de restaurantes" que no podían ejercer la actividad comercial.