Telefónica se enfrenta a un reto sin precedentes en España. Las conversaciones por establecer una nueva joint venture entre Orange y MásMóvil dejarían a esta nueva compañía como líder del mercado de banda ancha y líneas móviles, uno de los nichos más suculentos para el sector de las telecomunicaciones. Este hecho supone que, por primera vez, la operadora dirigida por José María Álvarez-Pallete sienta amenazado su reinado histórico en España.

No obstante, según relatan fuentes de la operadora, la alianza entre Orange y MásMóvil supone que las reglas del juego “estén condenadas a rediseñarse”. Las mismas voces recalcan a este periódico, además, que la operación tiene sentido ya que “se construirá un gigante que ayudará a estabilizar el mercado”, puntualizan. Desde hace meses, el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ha sostenido que la regulación está obsoleta y ha pedido constantemente “cambios considerables” a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). 

“Estamos maniatados por una regulación que se hizo en unas condiciones cuando se compró Canal+ y que ahora son totalmente distintas. Pedimos que esto se modifique”, sostuvo durante la presentación de resultados de Telefónica pertenecientes al ejercicio 2021. En sus peticiones figura, entre otras cosas, que se cambien las condiciones que se impusieron con los derechos del fútbol o la obligación que ha tenido durante muchos años a ceder su fibra óptica por el hecho de ser el líder en las telecomunicaciones. 

Número dos del mercado

Telefónica, a pesar del optimismo porque obliga a la CNMC a cambiar la normativa vigente, también sentirá el aliento en la nuca de la nueva operadora resultante de la operación anunciada el martes por la mañana. La fusión de Orange y MásMóvil pondría en ventaja, como se ha señalado anteriormente, a la joint venture por delante de Movistar en banda ancha y telefonía móvil. Por ejemplo, la fusión entre MásMóvil y Orange alcanzaría los 7,1 millones en fibra óptica y adsl frente a los 5,96 de Telefónica. En el mercado móvil, la nueva operadora llegaría hasta los 20,2 millones de euros mientras que Telefónica roza los 19 millones de líneas.

Por porcentajes, la fusión entre Orange y MásMóvil liderarían la cuota de mercado con un total del 43% del total de clientes, dejando a Movistar con el 29% y Vodafone, en tercer lugar, con el 22% en el mercado móvil. En banda ancha, sucedería lo mismo con la joint venture quedándose con el 42%, Movistar obtendría el 36% y Vodafone, con el 19%, de acuerdo a los datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. No obstante, la compañía española sí estaría por delante en el mercado de la telefonía fija, donde reina con 8,4 millones de clientes fijos en España.

A pesar de que la operación supondría un paso atrás para Telefónica en cuanto a ser el número uno en clientes, existen términos financieros en los que la operadora dirigida por José María Álvarez-Pallete en los que seguiría siendo la principal empresa. Es el caso de facturación que con casi 15.000 millones tiene una gran ventaja frente a los 8.551 millones de euros que sumarían Orange y MásMóvil. 

Lo mismo ocurre con la valoración de la empresa. En la actualidad, Telefónica tiene un volumen de 22.750 millones de euros sobre el parqué del Ibex 35. Por su parte, de acuerdo a las estimaciones de Orange y MásMóvil, la joint venture tendría un valor total de 15.900 millones de euros. La primera de ellas ha posee unos activos de unos 8.100 millones mientras que la teleco dirigida por Meinrad Spenger dispara sus cifras hasta los 11.600 millones de euros.

Respecto al Ebitda, Telefónica también seguiría liderando ya que, de acuerdo a las cifras presentadas recientemente, la operadora generó 3.377 millones en este ratio financiero mientras que el beneficio bruto operativo de la nueva empresa de telecomunicaciones no superaría los 2.200 millones de euros.

¿Menos marcas en la competencia?

Con la fusión de los dos gigantes de las telecomunicaciones en España se conseguirá, o al menos se intentará, que se reduzcan el número de marcas que residen en nuestro país. Precisamente, Álvarez-Pallete criticó que existan “más operadoras que en China”. Fuentes de MásMóvil, sin embargo, consideran que la fórmula “multimarca que viene desarrollando la empresa ha sido sinónimo de éxito” por lo que no descartan que la joint venture siga teniendo en su cartera el mismo número de operadoras.

Algo que no comparten las diversas fuentes del sector contactadas por este periódico. “Es inviable que se cree una nueva sociedad y que no haya una reorganización de marcas porque no tiene sentido que sea una mera operación financiera”, argumentan. En esta línea, las fuentes consultadas remarcan que “al haber menos competidores se producirían menos políticas comerciales agresivas, lo que provocaría una reducción de portabilidad”.

Sin embargo, fuentes de MásMóvil recuerdan que “otras operadoras continuarán con su política de precios baja, por lo que la operación va a ser igual o más feroz” puesto que querrán seguir “captando clientes a toda costa”.

MásMóvil tiene un total de cuatro filiales: Yoigo (que también utiliza las marcas MásMóvil, LlamaYA, Lebara España y Hits Mobile), Pepephone, Lycamobile España y Euskaltel (que también utiliza la marca Virgin Telco y es propietario de los operadores regionales R y Telecable), además de Sweno en colaboración con El Corte Inglés. Por su parte, Orange cuenta con la propia Orange, Jazztel y Simyo.