Solidaridad, unidad y esfuerzo. Estas han sido las principales premisas que ha lanzado la Comisión Europea para poder hacer frente a la posibilidad real de que Rusia corte el suministro de gas natural a Europa.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha instado a los países miembros a reducir un 15% del consumo del gas "inmediatamente" para que no se desate una crisis energética sin precedentes en el Viejo Continente. Esta iniciativa entrará en vigor el 1 de agosto y finalizará el 31 de marzo.

La propuesta de Europa, por el momento, es de consejo. Pero si Putin decide cortar el grifo del gas, la Comisión Europea obligará a todos los países a eliminar el 15% del consumo de forma inmediata.

De hecho, Frans Timmermans, vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea a cargo del Pacto Verde Europeo y comisario de Política de Acción Climática, ha ido mucho más allá y ha asegurado que los ciudadanos europeos "perderán el trabajo y pasarán frío" si no se frena el uso de la materia prima.

El político europeo ha insistido en que "no es necesario poner el aire acondicionado a 20 grados y dejar las luces puestas de escapartes durante toda la noche".

Con todo, la propuesta del Ejecutivo comunitario plantea asegurar el suministro a los hogares, a los hospitales y otras industrias críticas para el funcionamiento de la economía y para la competitividad de la UE.

Von der Leyen ha instado a actuar "desde ya" para no lamentar males mayores. La Comisión Europea ha asegurado que si Rusia decide frenar el envío de gas, la economía se reduciría en un 1,5% en el PIB de la eurozona.

“Todos los consumidores, administraciones públicas, hogares, propietarios de edificios públicos, proveedores de energía e industria pueden y debe tomar medidas para ahorrar gas”, señala la Comisión en su comunicado publicado este miércoles antes de la rueda de prensa.

Las perspectivas que maneja Europa no son nada halagüeñas y Europa contempla "un escenario real" de un corte de suministro. "Putin nos está presionando y es una hipótesis (la del cierre de gas) real. Tenemos que prepararnos", ha insistido Von der Leyen.

Solidaridad

Tal y como se subrayaba anteriormente, la Comisión Europea ha implorado solidaridad a los países miembro para un invierno plagado de interrogantes en materia energética. Por eso, la presidenta del organismo ha recordado que la UE se creó para ayudarse entre todos los miembros. "Debemos ahorrar y repartir el gas con nuestros vecinos. Son tiempos difíciles y hay que organizarse bien", ha dicho durante la rueda de prensa.

Para ello, la Comisión considera indispensable que se produzca un llenado urgente de las reservas de gas en Europa. La institución supranacional ha pedido a todos los países que los depósitos alcancen antes de que finalice el verano más del 80% de su capacidad. Una cifra que, por ahora, está lejos de cumplirse. "Si Rusia decide cortar el gas hoy mismo, muchos países tendrán una reserva muy por debajo de lo que pedimos", ha aclarado.