La crisis energética elevó los precios de la electricidad, gas y combustibles hasta máximos históricos. Si bien es cierto que en los últimos meses se han relajado, la gasolina y el diésel no han terminado de bajar como los que nos encontrábamos en las estaciones de servicio antes de la invasión rusa.

Con el carburante disparado, las estaciones low cost hicieron una campaña de captación de clientes sin precedentes y abarataron el litro de carburante en hasta 20 céntimos por litro. Repsol, Cepsa o BP entraron de lleno en la guerra y anunciaron importantes promociones. Con el fin de las ayudas obligatorias que impuso el Gobierno de Pedro Sánchez las grandes compañías intentaron retener a los usuarios con nuevas ofertas, sin embargo el boom de las EESS de bajo coste va en aumento.

En esta operación salida y con millones de españoles echados a las carreteras, las empresas que centran su estrategia en el low cost han vuelto a dar una vuelta más a la tuerca y durante las últimas semanas se han producido récords de diferencias de precios entre empresas como Ballenoil o Petroprix y Cepsa o Repsol.

A inicios de julio, coincidiendo con la primera operación salida la diferencia media nacional ascendió a 18 céntimos en la gasolina. Durante la última semana de este mes, la distancia es prácticamente igual. En el caso del diésel, el precio varía hasta en 25 céntimos dependiendo de la estación de servicio en la que se reposte. Por ejemplo, según los datos de este 25 de julio, el litro de este combustible en Ballenoil se sitúo en 1,29 euros mientras que en una de Repsol ascendió hasta los 1,52 euros.

Por comunidades, según los últimos datos recopilados en julio, Cantabria es la que más diferencia presenta con 26 céntimos por litro. Le siguen Navarra (22 céntimos), Comunidad Valenciana (20 céntimos), Andalucía, Madrid y Asturias (19 céntimos) y La Rioja y Cataluña (18 céntimos). Por el contrario, Baleares es la que menos diferencia presenta con 13 céntimos, seguida por Aragón, País Vasco (14 céntimos), Extremadura, Castilla La Mancha (15 céntimos), Murcia (16 céntimos) y Castilla y León (17 céntimos).

A juicio de la Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas (Aesae), los motivos que justifican este incremento en la diferencia de precio, es la sensación de una oferta limitada de producto fruto de la Guerra de Ucrania y los anuncios por parte de la OPEP de reducir la producción de petróleo. Sin embargo, según explica Manuel Jiménez Perona, presidente de Aesae “la oferta no es tan limitada como se hace creer, no obstante esta percepción favorece que las tradicionales estén aumentando su diferencial con las gasolineras automáticas, que mantienen unos márgenes más ajustados y son su competencia en este mercado” explica Jiménez Perona.

“La diferencia es que los consumidores que demandan gasolina son menos sensibles al precio, y por tanto las fluctuaciones son menores manteniéndose los diferenciales durante el año, mientras que los que repostan diésel sí lo son. Prueba de ello, es que el combustible más vendido por las gasolineras automáticas es el gasóleo”, indica el presidente de Aesae.

Crecimiento de facturación

Con la política de precios bajos, este tipo de estaciones de servicio no han dejado de crecer desde que se inició la guerra en Ucrania, tal y como contó este periódico recientemente. Prueba de ello son los últimos resultados de Ballenoil, la primera empresa low cost que ha hecho públicos sus resultados semestrales.

La compañía ha vendido un total de 427 millones de litros (más de 17,5 millones de operaciones), lo que supone un incremento de 125 millones de litros con respecto a los resultados obtenidos en el primer semestre de 2022, cuando había alcanzado los 300 millones. Plenoil prevé facturar en torno a 1.200 millones de euros en 2023 (sin IVA) y estima aproximarse a los 1.000 millones de litros vendidos.

Plenoil cuenta con 186 estaciones de servicio operativas -después de haber inaugurado 28 nuevas estaciones de servicio en el primer semestre del año- y espera abrir 37 más, hasta superar las 220 operativas a final de 2023. Para 2024, la compañía espera tener abiertas más de 300, manteniendo siempre los precios más competitivos del mercado y posicionándose como líder de la red de gasolineras automáticas por el número de aperturas efectuadas desde 2021.