Iberdrola ha presentado resultados empresariales con unas cifras que demuestran la fortaleza de su negocio en España y en el resto de mercados en los que opera. En concreto, la compañía ha conseguido ganar 4.803 millones durante el año pasado, lo que supone un 10% más que el mismo período del año anterior.

Las inversiones brutas de la energética alcanzaron también la cifra récord de 11.382 millones de euros, con un crecimiento del 6,0% frente a 2022, con un crecimiento del RAB en el negocio de redes del 8% hasta los 42.210 millones de euros y habiendo instalado más de 3.250 megavatios (MW) renovables en 2023, sumando una capacidad instalada total de 42.187 MW en el mundo. El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Iberdrola creció un 9,0% en 2023, hasta los 14.417 millones de euros.

Iberdrola ha aumentado su flujo de caja operativo un 8%, hasta los 11.096 millones de euros, y ha continuado reforzando su balance con más de 14.700 millones de euros de nueva financiación en condiciones competitivas de mercado. De esta cuantía, 13.300 millones cumplen con criterios ESG (medioambientales, sociales y de gobernanza).

Iberdrola, al igual que Repsol, ha confirmado que aumentará la retribución de sus accionistas. Así, la empresa aprobará en la junta de accionistas una remuneración complementaria de 0,348 euros brutos por acción, a los que hay que sumar el dividendo a cuenta de 0,202 euros brutos por acción abonado en enero. Así, la eléctrica repartirá 0,55 euros por cada título que se tenga de la cotizada del Ibex 35.

Impuestazo

Respecto al pago de impuestos, Iberdrola ha vuelto a recordar al Gobierno la cantidad de gravámenes que paga en España y en el resto del mundo. La empresa dirigida por Ignacio Sánchez Galán ha sido una de las más beligerantes con el impuesto a la banca y a energéticas junto a Repsol. En este sentido, y como viene siendo habitual, la empresa ha recordado que sus tributos superan los 9.000 millones de euros.

"De esta cifra, casi 3.500 millones se destinaron a España -en concreto 3.482 millones de euros-, un 35% más que en 2022. El abono en tributos en España es más alto que todos los gastos de personal, mantenimiento, operativos y financieros de la compañía en el país", señala la empresa.

El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha asegurado: “En un año de incertidumbres macroeconómicas, una vez más hemos mantenido nuestra histórica trayectoria de cumplimiento de objetivos, gracias a un modelo de negocio integrado y a nuestra estrategia centrada en inversiones y crecimiento en mercados estables. Después de un año de inversiones récord, hemos afianzado nuestra solidez financiera y continuaremos invirtiendo significativamente en la transición energética en 2024. Los nuevos marcos de inversión en redes y nuestros proyectos eólicos marinos en construcción nos ayudarán a conseguir un crecimiento sólido y rentable para el año”.