Los jóvenes que juegan y apuestan online han aumentado un 4% en el último año, hasta alcanzar los 534.000. Tras ese incremento, una de cada tres personas que apuestan online ya tiene menos de 25 años, y otra tiene entre 26 y 35, muy por encima del resto de franjas de edad. Son algunos de los datos que arroja el Informe sobre el jugador online que ha publicado el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 que ahora dirige Pablo Bustinduy, y que revelan cómo este sector del ocio, en el que siempre hay dinero en juego, cada vez atrae más la atención del público más joven.

Porque lo cierto es que si bien este año hay un 3% más de jugadores activos en España, que ya alcanzan los 1,64 millones, a partir de los 46 años todos los segmentos de edad han perdido jugadores, mientras que entre los de menor edad los números solo suben. Según el mismo informe, en 2023 sobre todo dejaron de jugar personas de entre 56 y 65 años, un 6%, mientras que los segmentos de entre 18 y 25 y de entre 26 y 35 los jugadores aumentaron un 4 y un 3%, respectivamente. 

Eso sí, los menores de 25 son los que menos gastan, registrando un desembolso medio de 333 euros al año. Por rango de edad, los que más gastan tienen entre 46 y 55 años, desembolsando casi 1.200 euros al año, y el mayor gasto medio se registre entre jugadores de entre 46 y 55 años, con 1.165 euros anuales. Por sexo, los hombres gastan más y las mujeres menos, 500 euros, aunque también son más del total: ocho de cada diez jugadores. De media, el gasto medio entre todos los jugadores que juegan online es de 736 euros anuales, o 60 euros al mes, 14 a la semana. 

¿Salen rentables esas apuestas? Los datos hacen entender que muchos empiecen a apostar y que después se enganchen al juego, porque el 20% consigue premio, aunque solo para un 5% supere los 580 euros. De hecho, el dinero que se apuesta ha aumentado un 16% solo en 2023, hasta alcanzar los 3,3 millones de euros. También el número de operaciones ha aumentado en el mismo periodo un 22%.

Ese aumento del gasto también se aprecia por edades, de hecho, llama la atención que todos los grupos de edad gastaron más en un año de fuerte inflación. Los menores de 25 años gastaron un 22% más, hasta los 35 años gastaron otro 22% más, en cambio donde más se disparó el gasto fue entre las personas de entre 56 y 65 años, que dedicaron un 67% más al juego.

¿A qué juegan?

La mayoría de los jóvenes se decanta por las apuestas online (427.000) seguidos de los que optan por el casino (340.000), y del póker (86.000), y del bingo (11.000). Entre los mayores se observan los mismas preferencias, pero al ser menos, la diferencia entre cada segmento de juego es menor. Aun así las apuestas están menos de moda que el año pasado (-2%), mientras que los jugadores que emplean dinero en el casino se han disparado un 20%. En total, las apuestas son el juego que acumula más jugadores, con 1,2 millones del total de 1,6 de jugadores. Que sobre todo opten por las apuestas por encima bingo y del casino parece tener sentido en tanto que premio medio se asemeja más a lo que se invierte que en otros juegos como el bingo.

La mayoría pierde menos de 100 euros

¿Se tradujo esa mayor inversión en mayores beneficios? Los datos muestran que solo un 10% de los jugadores ganaron más de 11 euros en 2023. La mayoría, el 80%, registraron pérdidas en el mismo año. El informe también cuantifica las pérdidas: la inmensa mayoría de los jugadores tienen pérdidas de entre 0 y 100 euros, en concreto, un 38% del total, 628.000 personas. En contraposición, solo registraron ganancias de entre 0 y 100 euros un 8%, 140.900 personas. Destaca por numeroso el grupo de los que pierden más de 3.000 euros en un año, con 120.600 jugadores, un 7%, mientras que los que ganaron más 3.000 euros fueron 21.600, el 1% del total.

Consumo intenta controlar la adicción al juego

El Ministerio de Consumo está tratando de evitar que el juego derive en adicción o en problemas económicos y en este marco, la semana pasada entraron en vigor varios artículos del real decreto que busca desarrollar entornos más seguros de juego. La ley pretende que los operadores de juego traten de evitar que el juego termine siendo un problema para los jugadores, tanto a niveles de adicción como de deudas. 

Bajo la nueva norma, es obligatorio que el usuario tenga que establecer un límite de tiempo y dinero antes de empezar a jugar, y cuando uno de los dos se termine, se cerrará la sesión. "El objetivo que se persigue es que el jugador establezca sus propios límites antes de empezar a jugar de tal manera que no se vea condicionado por los avatares del juego. Es importante conocer que la categoría otros juegos hace referencia a los juegos de casinos, las ruletas, el Black Jack o el propio póker, siempre y cuando no se trate de la modalidad póker de torneo", explicaron desde el Ministerio.

En el mismo marco, también se prohíbe el uso de tarjetas de crédito para jugadores con comportamientos de riesgo o intensivos… pero eso dependerá de las empresas que se dedican al sector. La ley especifica que los primeros se calificarán "según el criterio de los operadores que deberán establecer mecanismos y protocolos que permitan detectar los comportamientos de riesgo", mientras que los segundos quedan calificados como los que han perdido más de 600 euros a la semana, o 300 si son jóvenes, en tres semanas consecutivas.

Además, la norma establece la obligatoriedad de uso de medios de pago nominativos, con el objetivo de evitar que un jugador que ya ha agotado sus recursos use medios de pago de terceros, como familiares o amigos, para seguir jugando. Asimismo, quedan prohibidos mensajes "engañosos" durante el juego, como los "casi acertaste", "estuviste cerca" o similares, y también se exige que se emitan mensajes informativos de lectura obligatoria para poder seguir jugando. Estos mensajes los emitirán los operadores al menos una vez cada 60 minutos y tienen que recordar la conducta del juego, "como por ejemplo el tiempo jugado, las cantidades apostadas o las pérdidas netas producidas, y en ningún caso pueden ofrecer juicios de valor del operador sobre dicha conducta".