De Olot (Girona) al mundo. De Silicon Valley a una candidatura al Parlament de Catalunya. Anna Navarro i Casals o Anna N. Schlegel -apellido de su marido y como la conocen en el mundo empresarial- es el fichaje estrella de la lista de Carles Puigdemont para presidir la Generalitat de Catalunya. La catalana lleva años afincada en California (Estados Unidos) donde ha desarrollado su carrera profesional y donde se ha convertido en una de las voces femeninas más influyentes del ámbito tecnológico.

Navarro se mueve entre mundos opuestos: el de las letras y las ciencias; el del globalismo y el nacionalismo independentista catalán. Estudió filología anglogermánica, antes de mudarse a la costa oeste y de convertirse en ingeniera y referente en el sector tecnológico. Defiende una economía global y conectada, a la vez que afirma que “Cataluña podría ser un país”.

Es hija de una artista y de un ingeniero industrial. Ella misma cuenta en una entrevista con Vilaweb, que se crió viajando con su madre a ver arte y acompañando a su padre a medir el PH de los ríos de Girona. Navarro es la mediana de dos hermanos y sabe lo que es el mundo empresarial desde pequeña, ya que en la familia materna, con hasta tres compañías, había “muchos empresarios”. “Vengo de gente que ha pencado mucho para salir adelante”, comentaba en la misma entrevista.

Llegó a Estados Unidos de la mano de British Airways, empresa para la que trabajaba mientras estudiaba filología. En 1992, con solo 24 años, funda su primera start-up en la cuna de la innovación tecnológica, San Francisco. Desde entonces, y después de cursar estudios de liderazgo, ha dirigido equipos de ingeniería e infraestructuras globales. Ha trabajado en empresas como Cisco Systems, Xerox, VeriSign, VMware, NetApp y Procore Technologies, donde hasta la fecha era vicepresidenta de producto, mercados internacionales y globalización.

La ahora candidata de Junts es consciente de su papel en un sector poco feminizado y ha lanzado varias iniciativas para contribuir a que más mujeres y niñas logren lo que ella ha logrado. Ha fundado varias ONG con esta misión, Women in Localization y Imagine Educating Everyone, a través de la cual se han construido escuelas en Kenia.

Su trayectoria se premió en 2021 con la Creu de Sant Jordi, uno de los máximos reconocimientos que puede recibir una persona por parte de la Generalitat de Catalunya. La han recibido también deportistas como Pau Gasol y Alèxia Putellas o artistas como Montserrat Carulla y Josep Maria Pou. 

En el ámbito tecnológico ha recibido premios y reconocimientos como entrar en la lista de las 100 mujeres más influyentes del mundo, según el Silicon Valley Business Journal. En 2020, la revista Analytics Insight consideró que era la mujer más influyente del mundo en el ámbito tecnológico. También ha sido persona del año de la industria lingüística, por Think Global y mujer más admirada, según la revista CIO Look.

Navarro tiene un libro publicado en 2017, que solo está disponible en catalán y en inglés, no hay edición en español. En Truly Global / Veritablemente global (LaBreu), la catalana da claves a líderes empresariales para hacer de su empresa una compañía globalizada. “Este libro ayudará a vuestra empresa a tener éxito en una economía global progresivamente competitiva y establecer los fundamentos para pasar a ser de una empresa nacional a una marca internacional de referencia”, apunta la editorial.

La meditación y el deporte la han acompañado durante toda su vida. Cuenta en una entrevista en Activos que fue la capitana de su equipo de voleibol y que estuvo a punto de representar a la selección española en los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992, pero finalmente no fue seleccionada. Se deja aconsejar por pocos amigos pero responde a los mensajes que recibe pidiendo un consejo o asesoramiento. 

Trabajadora incansable, con cuatro hijos, asegura que si ella “lo ha hecho” es que “se puede hacer”. Le gusta rodearse de los mejores y asegura que nada de lo que ha conseguido lo ha hecho sola. Aboga por la flexibilidad empresarial de California, donde defiende que hay menos “burocracia”, ha criticado a Irlanda y a Países Bajos por ser paraísos fiscales y los debates políticos sobre temas económicos: “Como el aeropuerto. Tanta conversación y tantas opiniones están muy bien. Pero finalmente, ¿qué se va a hacer?”, reflexionaba.

Navarro es muy activa en redes y utiliza su influencia para defender el uso del catalán en todos los ámbitos de su vida, también en el tecnológico, y critica cuando este se cambia por el español en situaciones cotidianas. Ahora, después de publicar una despedida en su cuenta de LinkedIn, llega a la política dispuesta a aportar su “experiencia profesional para conseguir un gobierno de Cataluña que sea un referente internacional”.