Banco Sabadell ha vuelto a decir que no a BBVA. Casi cuatro años después se ha repetido la operación. BBVA lanzó la semana pasada una propuesta de fusión a la entidad catalana. Después de varios días de reflexión, el consejo del Sabadell se reunió este lunes y rechazó, de nuevo, la oferta de BBVA por considerar que infravalora “significativamente” el proyecto del banco. Pero más allá de esto ¿por qué ha dicho que no?

Lo primero que hay que saber es que BBVA ofrecía un canje en acciones, es decir, la propuesta era una fusión por absorción en la que cambiaba una acción de la nueva entidad por 4,83 de las actuales de Banco Sabadell. Este canje supone una prima del 30% según los precios de cierre del 29 de abril, el día previo a la propuesta de fusión. Esta es una de las razones de la negativa, ya que fuentes financieras apuntan a que una propuesta con parte en acciones y parte en efectivo habría tenido mejor recepción por parte de Banco Sabadell.

“Si no hay retribución en efectivo, los fondos no van a aceptar”, señalan esas fuentes. Además, BBVA iba a por todas con esta propuesta con la esperanza de que como Sabadell carece de núcleo duro en su accionariado podría tener vía libre para poder conseguir el sí de la catalana. Sin embargo, esa falta de oferta en efectivo ha hecho que no haya sido bien aceptada la oferta. Por ello, Banco Sabadell podría estar esperando a que BBVA mejore la oferta “no solicitada” y que sea parte en acciones parte en efectivo. 

Las fuentes financieras explican también que aunque parezca que es Banco Sabadell quien necesita a BBVA, por ser éste más grande, todo apunta que es al revés. “El objetivo de BBVA es ganar rentabilidad en España y eso se conseguiría con Banco Sabadell que es muy fuerte en pymes aquí en el país”, explican. Por lo que en este aspecto, parece que tienen el liderazgo los catalanes. 

Una situación diferente a la de hace cuatro años, ya que la posición de Banco Sabadell no era la misma, porque sus números eran más pequeños y tenían menos fuerza para negociar. En ese momento, BBVA dejó claro que era quien capitaneaba la fusión y apostaba por mantener a su cúpula directiva al frente de la entidad que surgiera de la misma. La situación de Sabadell era la de un banco más pequeño y, por ende, menor poder de negociación

Otra de las razones por las que Banco Sabadell ha rechazado a BBVA es por el reparto de poder. La entidad con origen en Bilbao propone la incorporación al Consejo de Administración, como consejeros no ejecutivos, de 3 miembros del actual Consejo de Administración de Banco Sabadell, seleccionados de mutuo acuerdo, con uno de ellos ocupando una vicepresidencia, sin funciones ejecutivas. En este punto, hay que tener en cuenta que Josep Oliu, presidente del Sabadell, no podría ocupar el cargo de vicepresidente al superar los 75 años de edad, el máximo permitido en los estatutos de BBVA. 

En este rechazo también se ha tenido en cuenta la posición del Banco Central Europeo. El supervisor bancario no está en contra de las fusiones, pero prefiere fusiones entre entidades de distintos países, que podrán llevarse a cabo cuando se ponga en marcha la Unión Bancaria. Y es que fuentes cercanas señalan que la fusión en un mismo país hace que la concentración bancaria ponga en riesgo las opciones financieras. En España, el 70% de la actividad financiera está concentrada en cinco entidades bancarias. Una concentración que es mucho mayor en Cataluña, de hecho, la absorción del Sabadell dejaría al 85% de las oficinas de esa comunidad en manos de tres bancos. Si bien en número de oficinas el banco resultante tendría más de 3.084 oficinas en España (1.881 del BBVA y 1.203 del Sabadell), en Cataluña esta nueva entidad sumaría 741 locales, el equivalente al 35% de las oficinas bancarias repartidas por todo el territorio catalán.

Por esto, también hay que tener en cuenta las cuestiones políticas para rechazar la fusión. Banco Sabadell es una de las entidades más fuertes en Cataluña por su apoyo a las pymes de la comunidad, por lo que una fusión podría poner en jaque a los independentistas. De hecho, Carles Puigdemont, ex presidente de la Generalitat y candidato de Junts+ para las elecciones al Parlament, ha expresado su satisfacción este martes ante la decisión del Banco Sabadell de rechazar una posible fusión con el BBVA.

"Es una buena noticia que el Banco de Sabadell se resista a esta operación. Es una mala noticia que pudiéramos perder el Banco de Sabadell. Cataluña necesita bancos que sean fieles a la región o que centren especialmente su interés en ella. Cualquier esfuerzo del Sabadell por mantener su identidad será positivo", ha declarado en una entrevista en TV3.

Ahora hay que esperar al próximo movimiento de BBVA, sobre si mejora su oferta o propone un canje en acciones y en efectivo. Banco Sabadell ha dicho que no, por segunda vez, por considerar que la propuesta daba poco valor a su proyecto. Pero a lo mejor con una nueva oferta vuelve a dejarse convencer.