Tercera noche de violentos disturbios en Barcelona y otras capitales catalanas y los partidos independentistas que negocian el futuro gobierno catalán siguen poniendo el foco en los Mossos d'Esquadra. Este viernes ha sido el candidato de ERC, Pere Aragonés, quien ha anunciado "cambios en Interior" tras cuestionar la actuación de los mossos en los últimos días.

Una opinión más que relevante de quien tiene todas las papeletas para ser el próximo presidente de la Generalitat, al frente de un Govern en el que los republicanos podría ocupar, por primera vez también, la Consejería de Interior.

Preguntado sobre las críticas de Junts y la CUP a la actuación de la policía autonómica, Aragonés ha matizado que "las actuaciones individuales" que no se ajusten a la proporcionalidad y los protocolos "deben ser atajadas de raíz para no manchar la labor de todo el cuerpo".

El presidente en funciones se refería así a la investigación abierta después de que una mujer participante en las manifestaciones perdiera un ojo, supuestamente por un proyectil de foam de la policía. La joven ha sido dada de alta este viernes tras ser operada en el Hospital Clínic de Barcelona.

Cambios en Interior

"Habrá cambios en muchos áreas", ha advertido Aragonés, y ha apuntado explícitamente a la voluntad republicana de introducir cambios en la gestión policial para conseguir "un modelo policial basado en la confianza entre el cuerpo y la ciudadanía". De hecho, los Mossos d'Esquadra ya son la segunda institución más valorada por los catalanes según el Centro de Estudios de Opinión, como recuerdan desde el cuerpo.

El aspirante a la presidencia catalana ha insistido en que el origen de las protestas, que no ha condenado, está en una sentencia "injusta que ataca a la libertad de expresión" por lo que ha considerado "lógico" que la ciudadanía "esté indignada, mientras el Rey emérito disfruta de unas vacaciones doradas".

Derecho a manifestación

En este contexto Aragonés ha defendido que la Generalitat debe garantizar el derecho a la manifestación, "es una obligación de los poderes públicos" ha apuntado. Aunque también a señalado que existe una "extrema minoría que no la ejerce pacíficamente" por lo que, ha recordado, "debe haber actuaciones para garantizar la seguridad de todos".

Más contundente ha sido la portavoz de ERC, Marta Vilalta, quien ha hablado directamente de "mala práxis" de los mossos que obligan a "repensar" el modelo de los mossos, en declaraciones a Ràdio 4.

Dimisión de Sàmper

En el trasfondo del debate, la formación del nuevo gobierno catalán y la presión de la CUP, que ha situado a los mossos en el eje de las negociaciones. Los antisistema exigieron este jueves la dimisión del conseller Miquel Sàmper, de Junts, y un "giro de 180 grados" en la gestión policial.

Más explícita ha sido su candidata Dolors Sabater, quien estos días ha asegurado en las redes sociales que "estamos preparados para encargarnos del Departamento de Interior". Con un objetivo prioritario, desmantelar las unidades de orden público, es decir, la Brimo y la Arro, responsables de responder a las manifestaciones violentas y garantizar desalojos conflictivos.

Desde Junts ya aceptaron ayer el envite, conscientes de que difícilmente repetirán como responsables de Interior, aunque finalmente se reedite la coalición de gobierno con Esquerra. Una previsión que hoy ha avalado Aragonés, al evitar responder a la petición de dimisión de Sàmper, asegurando que el próximo Govern "traerá muchos cambios".