El juez que investiga el caso Villarejo ha imputado a cuatro policías más por acceder a los ficheros del Cuerpo y llevar a cabo consultas sobre personas que fueron objeto de seguimientos por parte de la empresa controlada por el comisario hoy preso durante la ejecución de los encargos realizados por diferentes clientes privados, entre ellos el BBVA.

En un auto fechado este lunes, cuyo contenido ha avanzado la Ser y al que ha tenido acceso El Independiente, el titular del Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional accede a la petición de la Fiscalía Anticorrupción y llama al procedimiento en calidad de investigados a un inspector jefe ya jubilado, a un subinspector y a dos oficiales de policía como posibles autores de delitos de descubrimiento y revelación de secretos, cohecho y eventualmente cohecho pasivo. Estos cuatro agentes fueron identificados por la Unidad de Asuntos Internos como los usuarios que realizaron las consultas.

El instructor, asimismo, ordena a los investigadores policiales que realicen pesquisas para determinar quién accedió a las 12.40 horas del 4 de marzo de 2015 desde un ordenador de la Comisaría General de Información en las aplicaciones y ficheros Argos, Atlas y Sidenpol introduciendo el descriptor 'Smolnikov'.

Estas diligencias se enmarcan en la instrucción de la pieza separada en la que se investigan los encargos millonarios que, durante la etapa de Francisco González, hizo el BBVA a la empresa controlada por Villarejo (Grupo Cenyt) cuando éste se encontraba aún en activo en el Cuerpo Nacional. Como recuerda el juez en su último auto, el banco pagó por estos encargos al menos 10.284.689,30 euros.

Una de las consultas en el fichero Adexttra realizadas con las claves personales de los dos oficiales de policía ahora imputados tiene que ver con ocho ciudadanos búlgaros cuyos nombres figuran en una de las carpetas intervenidas a Villarejo cuando fue registrada su vivienda en noviembre de 2017 tras su detención.

El búlgaro 'Petrov'

Esos accesos a la base de datos policial tuvieron lugar el 3 y el 10 de noviembre de 2016, meses después de que Luis Pineda ingresara en la prisión de Estremera tras su arresto en la Operación Nelson. El sumario del caso Villarejo ha revelado que el presidente de la Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (Ausbanc) fue espiado presuntamente durante un año por un compañero de celda llamado 'Petrov' por encargo supuestamente de la entidad financiera.

Uno de los ocho búlgaros por cuyos datos se hicieron consultas con las claves asignadas a los dos oficiales imputados es un ciudadano que responde por M. I. Petrov, entonces encarcelado bajo la acusación de narcotráfico. La empresa de Villarejo llegó a elaborar un informe con datos sobre este hombre que Asuntos Internos le intervino en su casa, lo que ha permitido rastrear cómo obtuvo Cenyt datos confidenciales.

Luis Pineda sostiene que el procedimiento por el que llegó a estar tres años en prisión preventiva (de abril de 2016 a abril de 2019) y por el que está siendo juzgado ahora en la Audiencia Nacional nace de la "actividad policial corrupta" desarrollada por José Manuel Villarejo, al que sitúa detrás de la denuncia anónima presentada ante la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional que dio origen al caso.

En su auditoría de accesos en bases de datos policiales, los agentes de Asuntos Internos también han constatado la búsqueda de datos de personas cuyos nombres aparecen en otras carpetas de Villarejo, caso de los asuntos denominados 'Templar', 'Hard' o 'Neigbour'. Esas consultas se realizaron entre marzo de 2015 y noviembre de 2016.