Vox ha evitado condenar el destrozo del mural feminista de Ciudad Lineal, que esta mañana ha amanecido completamente vandalizado coincidiendo con la celebración del 8-M, Día Internacional de la Mujer. La formación había exigido la retirada de la pintura hace semanas porque, según expresó la concejala de Vox, Arantxa Cabello, representaba a una serie de mujeres que "han defendido la violencia" y era símbolo de un "pensamiento totalitario" y "una política comunista".

Las caras de las mujeres representadas en el mural, como Rigoberta Menchú, Rosa Arauzo, Angela Davis o Rosa Parks, han aparecido teñidas de negro en un acto vandálico que algunos dirigentes han atribuido a la organización juvenil Revolutio, ya que han aparecido carteles con la marca de este movimiento en los alrededores de la pintura calificando el feminismo como "una de las bestias negras de nuestro tiempo". Sin embargo, desde la organización han emitido un comunicado desmintiendo su participación en dicho acto vandálico.

El portavoz de la formación, Jorge Buxadé, cuando ha sido preguntado por la cuestión en rueda de prensa, ha rechazado condenar el destrozo del mural feminista pero sí ha condenado que "el Gobierno ocultase los datos y mantuviera las convocatorias feministas" en 2020; que "la extrema izquierda lleve once noches seguidas quemando Barcelona"; o que "la prensa no se haga eco de que el presidente del Gobierno es el principal responsable" de los actos vandálicos en la ciudad condal.

Buxadé ha reivindicado además en rueda de prensa la intención de Vox de convertir el 8-M en el Día Nacional de las Víctimas del Coronavirus. A su juicio, esta debe ser la fecha elegida en que se recuerde a los fallecidos por la pandemia porque fue el momento en que "el Gobierno, teniendo ya amplia información de autoridades sanitarias nacionales e internacionales sobre la efectiva propagación del virus y el riesgo inminente de una explosión sanitaria, optó por ocultarla a los españoles". Aquel mismo fin de semana, Vox celebró un multitudinario mitin en el Palacio de Vistalegre, que congregó a miles de personas.

El dirigente ha querido también poner el foco en "la realidad" de que el movimiento feminista actual es "radical" y "violento" y está pensando para "convertir a los hombres en el enemigo", motivo con el que ha argumentado que su formación no participe en ninguno de los actos institucionales previstos este lunes para celebrar el Día de la Mujer. "El feminismo actual produce desesperanza y confusión", ha defendido.