Investigación al emérito, nombramientos afines y 'caso Stampa': un mandato cargado de polémica

Los dos años con Dolores Delgado al frente del Ministerio Público han estado cargados de polémica y criticados tanto por los partidos de la oposición al Gobierno -el Partido Popular llegó a poner como condición para renovar el CGPJ que Delgado dimitiera- como en la propia carrera fiscal.

Desde que tomó posesión del cargo se cuestionó su independencia por proceder directamente como ministra de Justicia del Gobierno socialista de Pedro Sánchez, para el que además hizo campaña en las elecciones, con mítines incluidos.

Pero, una vez al frente de la institución, su política de nombramientos favoreciendo la elección de miembros de su asociación Unión Progresista de Fiscales (UPF) para los cargos de máxima responsabilidad dentro de la carrera han irritado a la mayoría de la carrera, comandando tales críticas los vocales de la Asociación de Fiscales (AF) y ahora también el portavoz de la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales (APIF), en el Consejo Fiscal.

Varapalo del Supremo

La Asociación de Fiscales, conservadora y mayoritaria en la carrera, llevó la política de nombramientos de Delgado ante el Tribunal Supremo. Considera dicha asociación y los fiscales críticos con la gestión de Delgado que con la elección de esos perfiles "afines" ha buscado en todo momento que quienes tenía alrededor no se opusieran a sus decisiones favorables a los intereses del Gobierno.

El Supremo anuló uno de los últimos nombramientos de Delgado, el del fiscal de menores Eduardo Esteban Rincón por falta de motivación, puesto que como denunció tanto quien también optaba al mismo puesto Miguel De la Rosa como la Asociación de Fiscales, la fiscal general no motivó de manera suficiente por qué fue el elegido para el cargo. Ella le mantuvo en el puesto, lo que provocó fuertes críticas en la carrera fiscal.

Investigación al emérito, fiscal Stampa y Gestión del Covid

Durante el tiempo que Delgado ha estado al frente de la Fiscalía se ha impulsado la investigación más trascendental probablemente de la historia del Ministerio Público en democracia: la del patrimonio en el extranjero del exjefe del Estado, Juan Carlos I.

Después de dos años de pesquisas, y una vez el emérito estableció su residencia en Emiratos Árabes, la Fiscalía descartó finalmente presentar querella contra él ante el Tribunal Supremo por la prescripción de los delitos, la inviolabilidad constitucional que le protege durante el tiempo que reinó y las regularizaciones fiscales que presentó para evitar que se le investigara por delitos contra Hacienda por el dinero que recibió y no declaró después de abdicar.

La polémica ha sobrevolado continuamente sobre el periodo de Delgado al frente de la Fiscalía

Además de en la investigación a Juan Carlos I, la polémica ha sobrevolado continuamente sobre el periodo de Delgado al frente de la Fiscalía. Ninguna de las denuncias que se presentaron contra el Gobierno de Pedro Sánchez por la gestión de la pandemia de Covid y los contratos millonarios de urgencia otorgados durante ésta no se han investigado. También se archivó la denuncia de los partidos de la oposición contra el contrato de emergencia que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, otorgó a la empresa de su hermano para proporcionar mascarillas por un valor de más de dos millones de euros.

Hubo otro asunto que minó especialmente la imagen de Dolores Delgado dentro de la carrera fiscal: el ya denominado caso Stampa. La fiscal general decidió dejar a uno de los dos investigadores del caso Villarejo, Ignacio Stampa, fuera de la causa, no escogiéndole como uno de los fiscales que optaban a una plaza en la Fiscalía Anticorrupción.

El fiscal fue objeto de una investigación interna en la Fiscalía de Madrid a petición de Vox y el acusado Villarejo por alinearse, supuestamente, con los intereses del partido que ejerce la acusación popular en el caso Tándem, Podemos. El fiscal denunció que quien ahora se quedará al frente de la Fiscalía, Álvaro García, intervino en las pesquisas dando indicaciones al fiscal superior de Madrid, Jesús Caballero Klink, para prolongar la investigación, que ésta contaminara su candidatura y quedar así fuera del caso. Vio la mano negra de la fiscal general detrás de estos hechos y así lo denunció ante el Ministerio de Justicia. Ahora se encuentra esperando una indemnización patrimonial.

El fiscal vio un interés especial en la fiscal general en esta causa en la que figuran audios suyos, comiendo con los investigados por corrupción y con su pareja, defensor de algunos de ellos, Baltasar Garzón. La Asociación de Fiscales pidió una lista de los ex miembros de la cúpula policial durante el Gobierno de Mariano Rajoy investigados y defendidos por el ex juez de la Audiencia Nacional para demostrar el posible interés de Delgado en apartar al fiscal Stampa de la causa. El abogado se negó y la fiscal general también rehusó dar explicaciones al respecto.

El pasado mes, Dolores Delgado se incorporó a la Fiscalía después de un periodo de baja por una complicada operación de espalda. Después de dos años de mandato marcado por la polémica y los enfrentamientos con la carrera, renuncia al cargo.