Una juez de Sevilla ha rechazado el recurso con el que Victorio & Lucchino intentaba frenar la subasta de tres cuadros del siglo XVII y un bargueño italiano de su propiedad con cuya venta pretende cobrar la deuda que mantienen con él un antiguo empleado de la finca que los diseñadores de moda andaluces tienen en la Sierra Norte sevillana.

Como viene informando El Independiente, un jardinero que trabajaba para Victorio y Lucchino en la finca que estos tienen en la localidad de Constantina -conocida como ‘Las campanillas de San José- intenta desde 2015 percibir la indemnización (25.393,23 euros) y los salarios de tramitación (30.102,28 euros) que le reconoció el juzgado tras ser despedido de forma improcedente en septiembre de 2014. La deuda asciende ya a 73.107,89 euros, de los que 60.923,24 euros corresponden a principal y 12.184,65 euros a intereses y costas.

El pasado 7 de marzo, el Juzgado de lo Social 1 de Sevilla acordó convocar subasta electrónica de tres óleos sobre lienzo y un mueble de corte barroco, valorados por un perito independiente en 60.000 euros e integrantes de un primer lote de 93 bienes muebles sobre los que se ha trabado embargo. Pero la puja no ha llegado a abrirse hasta el momento por los recursos presentados por Victorio & Lucchino en un intento de parar la ejecución.

La estrategia jurídica no les ha dado resultado. A mediados de junio, la magistrada Olga Rodríguez ya desestimó la suspensión cautelar de la subasta solicitada por Victorio & Lucchino no sólo por no concurrir ninguno de los supuestos previstos en la Ley Reguladora de la Jurisdicción Social sino por no reunir la petición los requisitos que exige la Ley de Enjuiciamiento Civil y no existir apariencia de buen derecho.

Lejos de aquietarse, los diseñadores recurrieron dicha resolución en reposición. El pasado 1 de septiembre, la juez desestimó el recurso contra el auto por el que se rechazó suspender la subasta dado que "no se aportan argumentos distintos a los ya esgrimidos en la solicitud de medida cautelar", opción ésta -precisa- que no procede en un procedimiento de ejecución. Este pronunciamiento ya es firme.

"Morosidad"

La titular del Juzgado de lo Social 1 de Sevilla hace constar que ha sido la "morosidad" de Victorio & Lucchino lo que ha provocado la continuación de la ejecución por los trámites legales, al tiempo que les recuerda que tienen "a su alcance" cumplir con la sentencia o prestar la caución que garantice el derecho del reclamante para evitar "el perjuicio que alega le ocasionaría la realización de la subasta de bienes muebles".

Agotada la vía procesal, la letrada de la Administración de Justicia ha emitido este lunes un edicto con las condiciones generales de la subasta, que se llevará electrónicamente a través del portal dependiente del Boletín Oficial del Estado (BOE). La puja se abrirá a las 24 horas de que se publique el anuncio en el BOE, admitiéndose posturas durante un plazo máximo de 20 días naturales.

Según se detalla en dicho documento, para poder tomar parte en la subasta es necesario depositar el 5 % del valor de los bienes (3.000 euros), no estando permitida la participación mediante aval bancario. El deudor puede pagar íntegramente lo que debe al ejecutante en concepto de principal, intereses y costas a fin de liberar los bienes embargados "en cualquier momento anterior a la aprobación del remate o de la adjudicación al acreedor", mientras que el ejecutante sólo podrá pujar si existen otros licitadores.

Los bienes a subastar se encuentran en la finca que los modistos tienen en la sierra de Sevilla y sobre la que hay anotados embargos por 676.000 euros

De los tres óleos sobre lienzo, el de mayor valor (38.000 euros) es el que tiene como motivo principal a la Inmaculada Concepción. Fechada en el siglo XVII y con unas dimensiones de 220 x 170 centímetros, se trata de una obra de Juan Carreño de Miranda, un pintor del Barroco de origen asturiano que trabajó como retratista del rey Carlos II (El hechizado) y de su madre, la regente Mariana de Austria.

"Como figura central María vestida de blanco y azul (símbolos de pureza y de los conceptos de verdad y eternidad, respectivamente), rodeada a ambos lados y de forma simétrica por un conjunto de ángeles que portan símbolos de las letanías (…). Sus ropajes ondean al viento; colores vivos y pincelada suelta. En actitud de recogimiento, de mirada baja, atenta al espectador con la mano en el pecho estando la obra extendida", describe la perito en su informe.

El lote incluye también el retrato de un romano en actitud triunfante sobre un caballo en corveta y de perfil (10.000 euros) -también del siglo XVII y atribuido al círculo de Zurbarán (no está firmada)- y un cuadro que representa la Huida a Egipto (8.000 euros), éste atribuido al círculo del pintor manierista italiano Leandro Bassano.

Extinción de empresas

Los bienes a subastar se completan con un bargueño italiano de corte barroco realizado en madera de nogal y con trabajo de marquetería en piedra dura. El mueble tiene unas dimensiones de 210 x 140 x 60 centímetros y ha sido tasado en 4.000 euros, por lo que constituye el bien de menor valor de los cuatro que podrán adquirirse.

Los cuadros y el mueble se encuentran en la propiedad que los diseñadores andaluces tienen (al 50 % cada uno) en la localidad sevillana de Constantina, figurando como depositario José Víctor Rodríguez Caro (Victorio). Según la información que consta en el Registro de la Propiedad, sobre dicha finca figuran embargos preventivos de la Agencia Tributaria, la Tesorería General de la Seguridad Social Junta de Andalucía que suman 676.088,65 euros.

En marzo de 2019, el Juzgado de lo Mercantil 1 de Sevilla dio por concluidos los concursos voluntarios de acreedores con la extinción de las dos empresas -V&L Costura, Diseño y Moda SA y Patrimonio de Moda SL- con las que operaban los diseñadores andaluces por insuficiencia de bienes para pagar todas las deudas que arrastraban. En el marco de uno de esos procedimientos, concretamente el referido a V&L Costura, Diseño y Moda SA, el juez autorizó la dación en pago al Banco Popular del inmueble que ocupaba el taller de Victorio y Lucchino -ubicado en la casa natal del pintor Velázquez- para saldar la deuda hipotecaria que mantenía con esta entidad financiera. 

Meses antes, en abril de 2018, el Juzgado de lo Mercantil 1 de Sevilla inhabilitó a José Víctor Rodríguez Caro y a José Luis Medina del Corral para administrar empresas durante un periodo de dos años tras calificar como culpable el concurso de acreedores de las dos citadas sociedades. "No parece imputable a los actuales administradores la generación de la situación de insolvencia, sin perjuicio de que no hayan desempeñado sus cargos con la diligencia debida en cuanto a obligaciones contables o administrativas se refiere", justificaron los administradores concursales.

En abril de 2021, cumplida ya la inhabilitación, José Luis Medina del Corral (Lucchino) fue nombrado administrador único de una nueva sociedad -constituida en junio de 2019 bajo el nombre de Aditia del Sur SL- que tiene como objeto social el diseño y confección de trajes a medida y de prendas y artículos de vestir, decoración de interiores y diseños hoteleros. José Víctor Rodríguez Caro figura como apoderado de dicha firma desde finales de agosto de 2021.