La brecha ya existe. Es profunda y si los planes del Gobierno salen adelante lo será aún más. No en términos porcentuales pero sí en importes absolutos. Las pensiones de jubilación y viudedad que se pagan en España dibujan un mapa territorial con grandes diferencias y que se agudizará en las cantidades mensuales que percibirán si los presupuestos planteados por el Gobierno son finalmente aprobados. En ellos se establece un incremento de las pensiones del 8,5% en concepto de actualización y de blindaje ante la inflación desbocada que arrastra la economía española.

Evidentemente, el porcentaje de actualización aplicado sobre una u otra realidad, sin distingos de renta, acarreará una mayor distancia entre quienes más y menos perciben en sus pensiones. Por el momento, la horquilla que diferencia las pensiones por jubilación más elevadas, las vascas, y las más ajustadas, las extremeñas, es de 494 euros cada mes.

De media un jubilado de Euskadi percibe una pensión de 1.540 euros, frente a la de 1.046 euros que de media conforma la pensión de un jubilado extremeño o los 1.065 de uno gallego. Si el proyecto de presupuestos presentado el martes se convierte finalmente en ley, la diferencia crecerá de los 494 euros actuales a los 536 mensuales. La brecha se ampliará en términos absolutos cronificando la doble realidad de los pensionistas en España.

Hasta 130 euros más al mes

Así, desde enero la actualización prevista supondría que de media en el País Vasco una pensión por jubilación aumentará su importe mensualmente en 130 euros, lo que la elevará hasta los 1.670 euros a partir del próximo año. En regiones como Galicia o Extremadura esa mejora apenas se traducirá en un aumento de la cuantía en 90 euros mensuales para las pensiones por jubilación. Entre quienes verán más incrementada su pensión, tras los jubilados vascos, figuran los madrileños, que de media la mejorarán en casi 124 euros al mes, seguidos por los navarros, en cerca de 120 euros más y los aragoneses en 112 euros.

En el resto de comunidades autónomas los incrementos medios de los importes de las pensiones por jubilación serán, si se aprueba la propuesta de presupuestos del Ejecutivo Sánchez, los siguientes: Cataluña (108 euros), La Rioja (102 euros), Catilla y León (106 euros), Castilla La Mancha (99 euros), Extremadura (89 euros), Comunidad Valenciana (97 euros), Murcia (95 euros), Andalucía (96 euros) y Canarias (98 euros).

La revalorización anunciada supone la mayor jamás aplicada a las pensiones y absorberá la mayor partida de los presupuestos del próximo año. Sólo este mes de septiembre el pago de pensiones en nuestro país ha requerido un desembolso de 10.867 millones de euros para hacer frente al pago de las pensiones de 9,95 millones de perceptores. Con la actualización del 8,5% la partida se tendría que engordar en cerca de otros mil millones cada mes. Se trata de una revalorización que más que triplica la que se aplicó este año, que fue del 2,5%, y que es casi diez veces la que se ejecutó en los dos años anteriores, que fue del 0,9%.

Pensiones por viudedad por encima de 1,000 euros

Aplicar esta subida de modo generalizado, a todos los ratios de pensiones sin distinción de su cuantía, también supondrá agrandar las diferencias en las pensiones de viudedad. Se trata de las más bajas de cuantas se abonan en nuestro país. De media, las pensiones por viudedad alcanzan los 780 euros mensuales. Ahora, la actualización las elevaría en otros 66 euros más de media.

De entre las 2,3 millones de pensiones por viudedad que se abonan cada mes, de nuevo las más altas son las que se pagan en el País Vasco, con un importe de 949 euros de media. Con la actualización que se anuncia pasarían a convertirse en las primeras pensiones de este tipo que de media superen los 1.000 euros al mes. La actualización del 8,5% las situaría de media en los 1.029 euros. Una cifra muy superior en comparación con el importe en el que se quedarían tras la actualización las pensiones de viudedad en Galicia (718 euros) o en Baleares (762).