Carles Puigdemont comparecerá este jueves y viernes ante el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) para defender los dos recursos planteados contra el Parlamento Europeo por la retirada de su inmunidad como parlamentario, primero, y la aceptación del suplicatorio cursado por el Tribunal Supremo el viernes. Una reclamación compartida con los eurodiputados Toni Comin y Clara Ponsatí.

Lo hará con un nuevo argumento a su favor, la derogación del delito de sedición acordada por PSOE, Podemos y ERC, que este mismo jueves debe iniciar su trámite parlamentario. Aunque el uso de esa reforma ante la justicia europea abre una brecha en el argumentario político de Puigdemont y su partido, Junts, contra la reforma pactada por Esquerra.

La Justicia europea devolvió la inmunidad a Puigdemont el pasado junio de forma cautelar y la defensa del expresidente, que ejercerán los abogados Gonzalo Boye y Paul Bekaert, tratará de que la recupere de manera definitiva. Además de los motivos que ya tenían previsto argumentar para ello, expondrán ante el tribunal la modificación legal que han planteado los partidos del Gobierno para eliminar el delito de sedición.

Junts, contra la reforma

Pero este uso de la reforma legal abanderada por el Gobierno y Esquerra choca frontalmente con la estrategia de Junts y el propio Puigdemont. Los neoconvergentes defienden que se trata de una reforma ad hoc para "traer a Puigdemont a España" como han asegurado Pedro Sánchez, Patxi López o Nadia Calviño. Un discurso en el que Puigdemont ha sido especialmente beligerante.

Desde Junts defienden que la única reforma aceptable es la derogación de la sedición sin más añadidos porque "el 1-O no es delito". Y acusan a Esquerra de haber aceptado una reforma que traiciona a los "exiliados" para salvar a Oriol Junqueras.

Boye ha sido igualmente crítico con la reforma propuesta por PSOE y Podemos. "La técnica legislativa es pobre, más bien mala y, como digo, será el caldo de cultivo para una serie de procedimientos que lo único que conseguirán es restringir, más si cabe, algunos derechos fundamentales" aseguraba recientemente en un artículo. Pero la utilizará en la defensa jurídica de Puigdemont.

Y los republicanos no han dejado de señalar esa contradicción. De momento en petit comité, hasta que llegue la vista ante el Tribunal General de la UE. Pero en un contexto de tensión creciente entre los dos grandes partidos independentistas, y con la aprobación de los Presupuestos Generales en ciernes, será munición de peso para los republicanos.

La hiperactividad del ex president

En este contexto se inscribe la hiperactividad en redes de un Puigdemont que en los últimos meses había relajado su perfil político. Especialmente desde que abandonó la presidencia de Junts, el pasado verano. En las últimas semanas, sin embargo, coincidiendo también con la salida de JxCat del Govern, Puigdemont ha regresado con fuerza a las redes.

El último ejemplo lo daba este martes, abrocando a la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, por una supuesta filtración al PP sobre el futuro parlamentario de Puigdemont. "La prensa española dice que la presidenta del Parlamento Europeo ha revelado en Barcelona que me retirará mi escaño como diputado. Tenemos más de un millón de votos y ganamos las elecciones en Cataluña. Y esta decisión contradice la decisión del Tribunal General de la UE. Debe explicarse" advertía en un tuit en inglés.

Metsola fue también su víctima este lunes, por no utilizar el catalán en el mensaje institucional publicado tras su visita, el pasado viernes, a Barcelona. Puigdemont le afea esa actitud recordándole que su lengua, el maltés, solo tiene medio millón de hablantes, frente a los diez del catalán.

El día anterior, y para conmemorar el aniversario de la muerte del general Franco, Puigdemont publicaba un tuit en el que afirmaba que el dictador "aseguró la continuidad del régimen dictatorial a través de la restauración de la monarquía". Un día antes, descalificaba a Josep Duran Lleida por sus nuevas responsabilidades al frente de Aeropuertos de Brasil.

O convocaba en redes -con vídeo de mensaje institucional incluido- a la manifestación del pasado fin de semana en Lleida en favor de los procesados por los disturbios que siguieron a su detención. Sin olvidar las denuncias por juicios a los implicados en el 1-O o las críticas a la citada reforma de sedición, con su futuro judicial en el centro.