Ante el cambio estratégico por el que aboga el PP, Vox ha reaccionado con un nuevo órdago. Mientras que Alberto Núñez Feijóo defiende alejarse de "los populismos" y la "política infantil", en referencia a la pasada moción de censura, e Isabel Ayuso ha decidido separar su "camino" de Vox, los de Santiago Abascal han decidido dar un giro de guion para situar en un nuevo compromiso a los de Feijóo: incorporarán a todos los programas electorales incentivos fiscales para la inversión en España, pero "sin discriminación". El pasado jueves, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso anunció su deseo de aplicar una enésima deducción fiscal para implementar las inversiones en la autonomía desde el extranjero, a lo que Vox se negó. Ello llevó a la candidata del PP de Madrid a la Asamblea a distanciarse de Rocío Monasterio, su hasta la fecha socia externa de legislatura.

Ayuso dio por finiquitada la colaboración con Monasterio en el último pleno de la Asamblea, previo a la disolución de la cámara que tendrá lugar los próximos días. Allí, la dirigente madrileña remarcó "la deriva" de Vox como partido y creyó adecuado que "cada uno siga su camino". A ello, Monasterio respondió que Vox ha apoyado una veintena de medidas propuestas por el PP, mientras que éste se ha negado a más de 30 sugerencias nacidas de entre las filas ultraconservadoras. Al margen del propio hecho en sí, el malo desenlace impulsado por Ayuso responde a su deseo de cosechar su primera mayoría absoluta, y adentrarse en la misma línea electoral de Génova de cara al 28-M: moderación y defensa de un proyecto autónomo sin ataduras.

Este lunes, en la primera rueda de prensa nacional del vicepresidente Jorge Buxadé en Bambú, tras la reunión del Comité de Acción Política, Vox ha defendido la posición adelantada por el presidente de la formación, Abascal, en uno de los últimos actos de partido el viernes en Valladolid, en territorio propio. Abascal defendió el implemento de la colaboración con el PP de Alfonso Fernández Mañueco, un gobierno que considera "el mejor a nivel regional". "Hay una firme voluntad de apoyar con más intensidad y firmeza el gobierno de coalición de Castilla y León, que ha bajado cuatro puntos el desempleo comparado con la media nacional; ha fomentado medidas de apoyo a las familias y bajos tributos", además de combatir "la despoblación", ha reivindicado Buxadé. Los gobiernos con el PP pueden garantizar "la firmeza de los principios con la buena gestión. Y votar a Vox garantiza mejorar la gestión y hacer libres" a los ciudadanos "sin afectar a los principios del partido", ha dicho el eurodiputado en claro contexto preelectoral.

Tras esa defensa política, y ante las críticas atribuidas al PP, que "apelan a la Agenda España" de Vox en un intento "falaz" de tergiversar las propuestas, dicen en el partido "para que parezca que vamos en contra de nuestras propias propuestas cuando no incluimos eso", Buxadé ha anunciado que todos los programas electorales, al menos a nivel autonómico, abogarán por extender la deducción fiscal propuesta por Ayuso a "todos los españoles, y no solo a las personas físicas", incluyéndose así a las empresas también. "Si es bueno, es bueno para todos", ha considerado el vicepresidente que cree que la sugerencia de Ayuso "cercena la igualdad de los españoles". Que cree necesario "no mentir ni engañar a nuestros compatriotas" ante una propuesta, además, "colada a modo de rodillo sin consulta previa", ha añadido Buxadé.

Vox denuncia que el PP utiliza propuestas de su Agenda España, como la "creación de incentivos para las empresas" que se han "deslocalizado" para empañar. Y muestra su deseo de extender la propuesta, porque "lo otro es beneficiar al inversor extranjero". Al introducirla a sus propuestas electorales de manera genérica, Vox intenta "ver si en Génova deciden que tienen el mismo programa o deciden que tienen que cambiarlo en función de sus intereses", dicen en referencia a un intento de excusarse en esa deducción para alejarse de Vox.

Esta misma mañana, en una entrevista en Telecinco, Ayuso ha manifestado que esta ruptura "no obedece a una estrategia del PP". "No es que rompa, pero lo que no voy a buscar, como antes hacía, es el entendimiento. Que sigan su camino y veremos lo que sucede después de mayo", ha dicho la líder regional, reduciendo en cierto grado la dureza del pasado jueves. Ahora bien, insiste en que seguirá intentando no depender de Vox. Y es que la presidenta aún recuerda que Monasterio ha tumbado asuntos troncales como los Presupuestos o la Agencia de Ciberseguridad.

Vox recurrirá la Ley Trans ante el Tribunal Constitucional

Al margen de la actualidad electoral, Buxadé ha anunciado también un nuevo recursos del partido ante el TC, esta vez contra la recién aprobada Ley Trans por el Congreso de los Diputados. Una ley que "desdibuja a la mujer" colocándola "en una situación de absoluta desprotección frente a la nueva regulación" de una de las leyes estrella del Ministerio de Igualdad y de Irene Montero. Tras manifestarse de esta manera, el portavoz de Vox se ha referido a la solicitudes anecdóticas amparada por la nueva legislación de un aspirante a policía local en Torrelodones (Madrid) y por seis presos condenados por violencia sexual en Asturias. El primero, ha pedido el cambio de sexo en el registro civil y ha finalizado las pruebas de acceso al cuerpo policial como mujer, mientras que los reclusos en búsqueda de un traslado a un centro de internamiento femenino.

Para el dirigente de Vox "ser mujer no es un trámite administrativo en el registro civil". Por ello se "reacciona ante la inacción de todo el mundo" en búsqueda de que una sentencia favorable retorne "el sentido común y jurídico de las cosas", ha finalizado Buxadé. Aludiendo, además, a la visita que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hace a China, y en línea con este asunto, Buxadé ha preguntado con ironía si Sánchez hablará con Xi Jinping de igualdad de género, de derechos humanos o de las minorías católicas "perseguidas" en el país. "Hay una cosa que une a Sánchez y a Xi, y es que ambos sonríen mucho cuando son recibidos en Davos porque trabajan para las mismas élites", ha dicho.