La reunión del Consejo Ciudadano Estatal de Podemos este sábado mantiene a Sumar en vilo a la espera de la intervención de la líder morada, Ione Belarra. Y es que a tan sólo dos días del cierre del plazo de la presentación de las candidaturas para el 23-J los morados mantienen la presión sobre Yolanda Díaz para que levante el veto a la ministra de Igualdad, Irene Montero, y sin concretar el nombre de Belarra como número cinco por Madrid.

La cita de hoy no tenía fecha cerrada, por eso llamó mucho la atención que Belarra la convocara precisamente este sábado, tras la bronca generada por la negativa de Díaz a incorporar en el pacto a su compañera de Consejo de Ministros, además de dirigente muy significada del partido morado. Finalmente Podemos estampó su firma para unirse a la coalición de más de quince partidos, pero lo hizo casi en tiempo de descuento y no sin críticas.

En Sumar rezuman cierto hartazgo ante la penúltima maniobra de la dirección morada, pero entienden que ya no tienen más margen de maniobra. Lo lleva diciendo toda la semana el portavoz de campaña de Díaz, Ernest Urtasun, obligado a responder en todas y cada una de sus comparecencias y entrevistas que la inclusión de Montero es una pantalla ya pasada, que esa negociación se cerró el pasado día 9 y no hay más que hablar. La líder de Sumar es mucho más esquiva al respecto, y experta en ponerse de perfil cuando no le apetece significarse, este viernes se limitó a despachar con un "no opino sobre otras formaciones políticas" al ser interrogada respecto a la cumbre morada de este sábado y el efecto que puede tener en Sumar.

Porque existe la posibilidad de que la secretaria general de Podemos se apee finalmente de las listas, decisión que ha venido contemplando en los últimos días, en buena medida por las críticas externas, pero también internas que ha recibido por una negociación a todas luces fallida desde el momento en que se avino a ofrecer la cabeza de Irene Montero. Desde que el día 9 firmó esa sentencia los morados no han dejado de pedir una rectificación que se no va a producirse.

Jaume Asens se cae en el último momento

Tampoco van a mover un ceja en Sumar si Belarra no imprime su nombre en las candidaturas, más allá de volver a generar ruido el día en que se constituyen los ayuntamientos y toda la izquierda está pendiente de hacer la contabilidad de los pactos municipales PP-Vox. Cabe reseñar que Sumar es uno de las pocos partidos que no ha formalizado aún sus listas electorales. Lo han hecho ya PSOE, PP y Vox. El partido magenta de hecho está sufriendo deserciones de última hora como la de Jaume Asens, presidente del Grupo Confederal de Unidas Podemos durante esta última legislatura y que ayer anunció su decisión de dejar la política.

Asens, que parecía llamado a encabezar la lista barcelonesa -una de las circunscripciones por las que pueden sacar segura representación- explicó a media tarde en un anuncio que nadie esperaba que había tomado «la decisión de no presentarme a las próximas elecciones. He llegado a la conclusión de que hay personas que pueden liderar la organización catalana en Madrid mejor que yo mismo en el nuevo ciclo político que se abre". escribió en Twitter sin dar más concreciones de los motivos de su decisión. Le sustituirá Aina Vidal. Sigue así los pasos del ministro de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón, que tampoco concurrirá a las elecciones.

Sumar es de la pocas formaciones que aun no ha presentado sus listas al Congreso

Si bien el pacto con Podemos pasa por el quinto puesto de la lista madrileña para Ione Belarra, el hecho de que no se haya formalizado su presentación deja muchas incógnitas en el aire. Cabría otra decisión mucho más drástica, esto es, romper y presentarse con sus propias listas bien bajo su denominación o esa marca "fantasma" registrada en plena negociación con el partido de Yolanda Díaz, "Juntas sí se puede". Esta maniobra les obligaría a preparar en tiempo récord las listas para poder presentarlas este lunes, salvo que ya las tuvieran confeccionadas.

Tampoco es descartable que tome la palabra este sábado la propia Montero, el objeto de todas la invectivas de los socios de Sumar, "tanto por méritos propios", dicen en Sumar, como por su proximidad a otro de los receptores de ese rechazo, su pareja y ex vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias con quien no pocos dirigentes de la nueva plataforma electoral tienen cuentas pendientes desde hace tiempo.

De momento, Podemos ha puesto nombre y apellidos a los dirigentes territoriales morados en las circunscripciones que encabezarán. Es el caso de Martina Velarde en Granada, Pilar Garrido en Guipúzcoa, Javier Sánchez Serna en Murcia, la eurodiputada Iodia Villanueva en Navarra, Roberto Uriarte en Álava y Noemí Santana en Las Palmas. No son las únicas provincias que encabezan, pero sí las que pueden tener alguna posibilidad de conseguir representación, aunque lo cierto es que los sondeos internos no son muy halagüeños. En otros territorios como Ávila, Palencia, Segovia o Teruel no parecen tener ninguna posibilidad.

Todo depende sin embargo de lo que diga o haga hoy Podemos.