Al lehendakari Iñigo Urkullu tan sólo le resta un año de legislatura. Lo afronta tras más de una década en el cargo y con la incógnita y será el candidato que el PNV elegirá para optar a un cuarto mandato en un momento de dudas en el PNV tras la sustancial pérdida de votos que ha registrado en los comicios del 28-M y el 23-J. Este jueves arranca de modo oficial el curso político en Euskadi y lo hará en un pleno en el que Urkullu volverá a situar en el centro de su acción política el autogobierno vasco: "La salud de nuestro autogobierno y nuestra capacidad de internacionalización serán claves para el futuro de nuestra país". .

En un avance hecho público hoy por el Ejecutivo, el lehendakari se mostrará muy duro con la actitud que las principales instituciones del Estado han tenido en todos estos años con el autogobierno vasco, su respeto y su desarrollo. Urkullu acusa al Tribunal Constitucional, a la Justicia y a la legislación impulsada por el Gobierno de haber dañado y frenado el autogobierno de Euskadi. Asegura que se ha producido una evidente "erosión" del mismo por distintos aspectos que van desde la "expansión de la hegemonía normativa estatal" hasta la jurisprudencia del Tribunal Constitucional "cada vez más restrictiva con el ejercicio competencial autonómico". Urkullu considera que este impacto negativo está produciéndose incluso sobre materias sobre las que el País Vasco es competente exclusivo.

También acusa al Estado de estar "obstaculizando" la participación de Euskadi en el ámbito de decisión de la Unión Europea, "algo que constituye una expresión indubitada del autogobierno", apunta. Urkullu pretende que Euskadi lidere "la defensa de los intereses del Eje Atlántico Europeo" mediante la "participación directa de las regiones y naciones atlánticas" en lo relativo a la transición verde, digital y social.

El euskera, cuestionado

El euskera es otro de lo ejes sobre los que el lehendakari expresa su preocupación y que sitúa en el bloque de "erosión del autogobierno" que se está produciendo: "Algunos tribunales están planteando un cuestionamiento intensivo de actuaciones administrativas en torno al euskera, una de las dos lenguas cooficiales de acuerdo al artículo 6 del Estatuto de Gernika".

Concluye su crítica al impacto que sobre el autogobierno persiste recordando las numerosas competencias pendientes de transferir que aún tiene el Gobierno y que se comprometió a culminar.

No obvia que pese a la ponencia de Autogobierno celebrada la legislatura anterior en la actual no se han dado pasos significativos. Las propuestas de nuevo estatuto presentadas por PNV-PSOE y Podemos, además de las de EH Bildu y el PP no suscitaron un acuerdo suficiente que permitiera un consenso suficiente, "pero tengo la convicción de que sustentarán los consensos futuros", asegura el lehendakari.

Durante el pleno que se celebrará el jueves Urkullu planteará hasta 40 compromisos para el último año de la legislatura y que estructurará en cuatro campos: personas, prosperidad, planeta y autogobierno. En el primero de ellos planteará medidas en ámbitos como los servicios sociales, Igualdad, Salud, Seguridad pública o euskera. En el área de "prosperidad" las medidas que propondrá estarán dirigidas al cambios como la ciencia e innovación, el turismo y el empleo. En materia de sostenibilidad verde, Urkullu quiere dar pasos en la economía circular, la regeneración urbana, la vivienda y la bioeconomía. Por último, el el autogobierno las novedades que aspira a incorporar se definen como innovación pública y gobernanza y el desarrollo del plan Euskadi-Basque Country 2025 puesto en marcha al inicio de este mandato.