El portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Madrid, Javier Ortega Smith y el resto de concejales de Vox han abandonado el Pleno del Ayuntamiento de Madrid donde se debatía una sesión extraordinaria para reprobarle por lanzar una botella hace unas semanas a Eduardo Fernández Rubiño, concejal de Más Madrid, alegando que no se ha permitido que Ortega tenga un turno más de réplica.

Al término de su intervención, Javier Ortega Smith ha asegurado que “todavía quedan 30 minutos más” de réplica por parte del equipo de Gobierno municipal y las portavoces de Más Madrid y el PSOE-M, cuando “ni siquiera me han concedido cinco minutos para contestar” en la reunión de la Junta de Portavoces.

“Por tanto, abandonaremos este pleno porque no me interesa escucharles, porque ustedes no han querido escucharme a mí”, ha resumido, tras lo cual han salido del salón de plenos.

El 'botellazo' de Ortega Smith

Tras intervenir en el último punto de la sesión ordinaria de diciembre, la última del año, Ortega Smith se acercó a Fernández Rubiño y golpeó con su carpeta una botella de plástico vacía ubicada en el escaño del edil de Más Madrid, un hecho motivado por un comentario de Rubiño sobre las palabras de Ortega en su intervención, a quien espetó que le había parecido “asqueroso” su discurso.

Después del incidente, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, manifestó su “condena sin paliativos” por lo que consideró como una “agresión” y, sumándose a las peticiones de Más Madrid y el PSOE-M, pidió que el portavoz de Vox dejara el acta de concejal, una postura que ha mantenido desde entonces.

Ortega Smith reconoció que “no debería haberle tirado la botella” pero negó que se hubiera producido una agresión y, en última instancia, aseguró que no dejaría su acta por la situación acontecida.