La Guardia Civil revela que hay más de una narcolancha compatible con el asesinato de Barbate

Cuatro motores, un chaquetón "naranja o rojo" y dos antenas en la popa. Estas son las pistas con las que la Guardia Civil ha tenido que tratar de acertar con los culpables del asesinato de dos compañeros en Barbate (Cádiz) después de que una narcolancha les pasara por encima. El principal sospechoso, Francisco Javier Martín Pérez, alias Kiko El Cabra, confesó que esa noche estuvo allí, pero aseguró ser inocente, mientras que varios investigados señalan a un marroquí de nombre Karim como el piloto de la lancha. Los últimos documentos incorporados al sumario revelan que no hubo una sola lancha con cuatro motores, como se dijo inicialmente, sino que había dos así que ambas podrían ser compatibles con la embarcación que aplastó el Zodiac oficial. Los investigadores, no obstante, mantienen su tesis inicial por el momento.

"Inicialmente se apuntó a la presencia de una única embarcación con cuatro motores presentes en el Puerto de Barbate", ha reconocido la Guardia Civil en el último informe incorporado al sumario y al que ha tenido acceso El Independiente. Sin embargo, ahora el Cuerpo explica que está haciendo un estudio en profundidad de todos los vídeos que existen (redes sociales, grabados por testigos, cámaras de seguridad y Go-Pro de uno de los agentes supervivientes) y se han topado con "la presencia de dos embarcaciones con cuatro motores, de las seis que había presentes en dicho lugar" la noche del 9 de febrero cuando las lanchas ilegales se estaban refugiando de un temporal.

Este punto es importante porque es el indicio principal con el que se iniciaron las pesquisas que se siguen en al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Barbate para aclarar la muerte de los guardias civiles David Pérez Carracedo y Miguel Ángel González. Tres testigos clave, que estuvieron en un barco fondeado en el Puerto el día de los hechos, dijeron sin rastro de duda que la barca que asesinó a los agentes fue "la de mayor tamaño, cuatro motores y ocupada por cinco tripulantes". Se equivocaron en lo de los cinco tripulantes porque las pesquisas han revelado que fueron seis.

Y seis fueron finalmente los detenidos, de los que varios se encuentran ahora en prisión provisional. Tres guardias civiles que presenciaron los hechos desde el espigón en tierra, "coinciden describiéndola como la de mayor tamaño, de color oscuro y con cuatro motores". Por lo que las descripciones confluyen.

La Guardia Civil arrestó al día siguiente a Kiko El Cabra y a otros cinco colaboradores y entre los detenidos se cogió una chaqueta de color rojo que concuerda con la descripción de los testigos. Intervinieron una narcolancha con cuatro motores, pero las dudas sobre la autoría llegaron cuando el domingo 11 de febrero unos gaditanos difundieron un vídeo que se hizo viral que mostraba una narcolancha varada en la playa de Chiclana completamente destrozada, también con cuatro motores.

Las defensas de los capos han pedido a la magistrada que se cerciore de que fue este vehículo hallado de forma fortuita y no el intervenido, el que se utilizó para asesinar a los guardias. "Es de una importancia nuclear aclarar este hecho, ya que dicha embarcación se habría encontrado con menos de 24 horas de diferencia respecto a la de mi defendido, encontrándose a una distancia inferior del lugar de los hechos y aparentemente con unos daños más que compatibles con la embarcación de la Guardia Civil", refleja el escrito del abogado de Kiko El Cabra. La fiscal no se ha opuesto a esta diligencia.

Además, el único detenido de origen marroquí, Mustafá Chrayah, declaró ante la magistrada que había sido un tal Karim, también de Marruecos, el autor de los hechos. Fuentes policiales de la lucha contra el narcotráfico revelan igualmente que la noche del ataque se habló con varios confidentes que también dieron el mismo nombre, dijeron que Karim era el conductor.

Las dos antenas

Sin embargo, para los agentes es crucial otro detalle de la narcolancha: las dos antenas. Los marineros testigos señalaron que la narcolancha buscada tenía "dos antenas en la zona de popa". "En relación a este dato, hay que poner de manifiesto lo poco habitual que es el uso de dos antenas, una GPS y otra WIFI, en este tipo de narcolanchas, siendo únicamente la primera, la que suelen llevar instaladas para facilitar la navegación", dice el informe de la Benemérita.

Solo una de las seis tenía estas dos antenas y coincide con la intervenida, por lo que los investigadores asumen pocas dudas. "Con lo cual, más allá de otros indicios que apuntan en la misma dirección, se puede afirmar que la embarcación observada en las grabaciones del Puerto de Barbate la tarde del 9/2/24 fondeada con cuatro motores y dos antenas, la intervenida el 10/2/24 en playa La Hacienda de La Línea de la Concepción con cuatro motores y dos antenas, y la señalada por los testigos que se reseñan a continuación que presenciaron los hechos de 9/2/14 como 'la de dos motores y dos antenas' son la misma embarcación, además, difícilmente confundible la otra a tenor de las dos condiciones que reúne", reflejan.

El Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) de las centrales Cos de las Comandancias de Cádiz y Algerias, siguió durante horas el trayecto de una narcolancha con cuatro motores que en su huida se observó sobre las 21:50 horas frente a Zahara de los Atunes (Cádiz) y con el aviso a los agentes de las patrullas territoriales se pudo detener a las 00:45 horas a tres ocupantes de los ocupantes que habían desembarcado.

Los tres testigos de la Guardia Civil los "identificaron plenamente como tres de los tripulantes a través de las cámaras de seguridad del puerto de Barbate [...] a bordo de una embarcación narcolancha, de cuatro motores y dos antenas, ocupada por seis personas". Tras dejar en tierra a los tripulantes, volvieron a huir, se escondieron tras un cargero y finalmente los otros tres narcos fueron arrestados cerca de la playa La Hacienda de dicha localidad, huyendo a pie sus y tras haber abandonado la narcolancha y la ropa.

El informe de Criminalística

El 19 de marzo, el laboratorio de Criminalística de la comandancia presentó un primer informe del análisis de la narcolancha encontrada y para ellos los restos de pintura encontrados "se ajustan" con el asalto a la embarcación de la Guardia Civil.

Las características morfológicas, así como en analisis de la pintura de color gris, por la "fricción sobre los fragmentos de la embarcación color negro" también podrían coincidir, refleja el informe. Si bien, los abogados de las defensas han adjuntado fotografías del estado de la narcolancha que se encontró varada y abandonada y consideran que el destrozo que muestra la convierte en sospechosa de haber pasado por encima del Zodiac de los guardias.

La Guardia Civil ha creado un equipo conjunto de investigación debido a "la complejidad de la investigación y la gravedad de los hechos". Por eso, trabajan de forma coordinada un equipo de delitos contra las personas/homicidios de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Cádiz y el equipo de Homicidios y Secuestros Extorsivos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.

Acción coordinada

En cualquier caso, quién lo hiciera servirá para esclarecer los flecos judiciales, pero los investigadores buscan demostrar que la acción fue coordinada entre todas las embarcaciones y por tanto los delitos fueron cometidos por todos. "Las 6 narcolanchas inician de manera organizada maniobras de aproximación violenta y pasadas a gran velocidad en torno a la embarcación oficial, tratando de hundirla, poniendo, declaran los testigos, en grave peligro la vida de los agentes que la tripulaban", refleja el último informe.

Las embestidas duraron 2 minutos y 42 segundos, como avanzó ayer este medio. Según las imágenes, un tiempo "suficientemente largo como para que las embarcaciones implicadas se alternaran en las acometidas que llevaron a cabo [...] esperando fondeadas o navegando a baja velocidad en una zona alejada, prodríamos decir 'hasta que llegara su turno' para embestir de nuevo, asegurándose de ese modo, además, mantener esta especie de orden de acción", dice el documento policial.

No fue solo una actuación perfectamente "coordinada" entre todos. El comandante del puesto de la guardia Civil en Barbate que estuvo presente en el Puerto de la localidad durante el asesinato, dice además que unas se avisaron a las otras de que las Fuerzas de Seguridad del Estado estaban llegando.

En una declaración por escrito aportada al sumario, cuenta cómo a las seis de la tarde había seis narcolanchas en el mar (se especuló con que fueran cinco), repartidas de forma que había tres amarradas a la boya verde y otras tres a una boya roja. Los miembros de la Benemérita comenzaron a preparse para soltar la embarcación del GEAS sobre las 19:40 y a las 19:50 las seis lanchas soltaron los amarres y empezaron a "navegar lentamente dentro de la bocana del puerto, acercándose unas a otras e interactuando sus ocupantes". Los tripulantes "pudieron haber informado de la inminente botadura de la embarcación de la Guardia Civil", revela el informe.