Sumar no respaldará la votación de este martes por la tarde en el pleno del Congreso de los Diputados. La confluencia que lidera la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, rechaza respaldar la propuesta de la legislatura pasada rescatada por el PSOE: la abolición de la prostitución y el proxenetismo. Especialmente por el rechazo interno de Catalunya en Comú, que es regulacionista y que, tras un debate interno, ha hecho que el grupo asuma una posición conjunta para apostar por la negativa. Así lo ha confirmado la diputada magenta, de la cuota catalana, Gala Pin, en una comparecencia parlamentaria. Ya Sumar, entre marzo y abril, denunció la escasa voluntad de los socialistas para pactar un consenso común con el que presentar una normativa. Desde entonces, lo han vinculado a un deseo electoralista del PSOE para ir contra su socio minoritario y dividirles en los ciclos electorales vasco, catalán y europeo.

"Las fuerzas de Sumar no podemos darle apoyo a esta proposición de ley, que es atravesada generalmente por la desigualdad, por un racismo estructural, muchas veces también por la transfobia y la pobreza. El PSOE no aborda en absoluto soluciones a ninguna de estas cuestiones estructurales". Es más, condena a "mayor precariedad, clandestinidad, indefensión y vulnerabilidad a muchos mujeres que ejercen la prostitución. Si queremos hablar de los derechos de estas mujeres, hay que hablar de reformar la Ley de Extranjería, entre otras", ha comentado Pin. Podemos coincide con esa postura, y ha anunciado la abstención de sus cuatro miembros del Grupo Mixto. "Nos parece que es una modificación del Código Penal" para generar "algunos titulares" pero "no consigue abolirla ni da seguridad, sino que añade riesgo", ha sostenido Javier Sánchez Serna, portavoz morado.

La diputada también ha incidido en ese electoralismo. "Si no, no se entiende que lo haya" planteado "sin hablar siquiera con los socios". "Si se aprueba esta ley será por una alianza con el PP", ha añadido. Aina Vidal, la coportavoz del Grupo Plurinacional y líder de facto de los comunes en el Congreso, ha avalado esta posición. "Es un error grande del PSOE, pero a nosotros no nos van a coger por dos lados", ha recalcado, apelando a la "unidad" de su Grupo.

Ante esta tesitura, y con la necesidad de contar en esta votación con mayoría simple [más 'síes' que 'noes'], el PSOE requiere del apoyo o al menos la abstención del PP. Partido en el que se sustentó el mandato anterior para los trabajos en comisión, ante la misma división en Unidas Podemos, con los comunes en contra. Los populares, igual que los socialistas, apuestan por esa abolición. También Vox, aunque, de cara a la campaña de las elecciones europeas, que empieza el viernes de madrugada, un respaldo de Génova a Sánchez alentaría a Bambú y a los de Santiago Abascal a profundizar en sus críticas e incrementar el discurso que busca asemejar a PP y PSOE como "lo mismo". Vox no ha confirmado postura. Ha sido favorable anteriormente, pero siempre y cuando se ofrezcan alternativas para las mujeres que la ejercen.

El PP, en voz de su portavoz parlamentario, Miguel Tellado, ha indicado en rueda de prensa posterior de la junta de portavoces de este martes que valorarán la postura del Grupo en una reunión previa al pleno. Pero considera importante ver el desarrollo del debate. Los populares apuntan a una abstención, que daría luz verde para tramitar la ley. Su homólogo socialista, Patxi López, tras Tellado, ha evitado entrar en polémicas con Sumar y, apelando a todos los grupos, ha considerado que "esta tarde todo el mundo se retratará en la votación". La finalidad, ha dicho, cree que es la correcta: "Castigar a todos los que explotan a las mujeres. Es una cuestión de principios y vamos adelante con ella. Pase lo que pase. Estamos convencidos de que saldrá, porque hay un sentir mayoritario del país".