La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha anunciado que el ayuntamiento de la capital bajará el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) por tercer año consecutivo.

La medida afectará a un total de 2.2 millones de recibos, desglosados en 1.5 millones de viviendas, 96.200 a locales comerciales, 30.000 a oficinas y más de 11.000 a naves industriales. "Se rebaja el tipo efectivo del 0,456 al 0,428, al tiempo que se rebaja la plusvalía o se mantienen una serie de bonificaciones a familias numerosas", ha señalado el alcalde popular José Luis Martínez-Almeida.

Estas ordenanzas, ha continuado el primer edil, permitirán que la capital "siga creciendo" al tiempo que contribuirán a "consolidar el modelo de la ciudad de Madrid, que se contrapone con el modelo del Gobierno, ya que no es momento de subir impuestos y sí de estimular la actividad económica con seguridad jurídica".

Cierre de "un vínculo virtuoso"

Para el regidor madrileño, este proyecto de ordenanzas viene a cerrar un "círculo virtuoso que ha hecho del modelo político de Madrid salir antes de la situación de crisis económica y social de la pandemia", pese a haber sido "agravado por unas políticas del Gobierno de la Nación con subidas fiscales y mensajes de inseguridad jurídica".

"Caminamos en una dirección distinta. Somos la locomotora de España, y el año 2022 será decisivo para la recuperación económica", ha expresado a renglón seguido.

Estas Ordenanzas Fiscales, ha continuado, permitirá "dar más y mejores servicios públicos, los contratos de limpieza tendrán una subida de 80 millones de euros, permitirá dotar de diez unidades nuevas a Samur, o que consolida ese mantenimiento del área de bienestar social".