Este domingo a las 11:30 horas, ocho activistas de Ultima Generazione, realizaron una acción en la Fontana di Trevi. Diluyeron carbón vegetal en agua y lo vertieron en la fuente con el fin de exigir el cese inmediato de las subvenciones públicas a los combustibles fósiles.
Las fuerzas policiales intervinieron de inmediato y a las 11:45 horas se llevaron a los activistas. Según explicó hoy el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, al visitar el monumento, la emblemática Fontana di Trevi no ha sufrido daños después de que un grupo de activistas contra el cambio climático arrojara un tinte negro en sus aguas.
El líquido negro, a base de carbón, se depositó en la base impermeable de la fuente, evitando así que manchara el mármol. El líquido que se arrojó en esta acción es presumiblemente carbón líquido, similar al que utilizaron en acciones similares, como en la fuente de la Barcaccia en la Plaza de España romana o en la fuente de los Cuatro Ríos de Gian Lorenzo Bernini en la Plaza Navona.
Los activistas recordaron que los combustibles fósiles son los responsables del cambio de clima por el que han tenido lugar las inundaciones en las regiones de Emilia Romaña y las Marcas en los últimos días que se han cobrado la vida de 14 personas, obligando a 10.000 personas a abandonar sus hogares y dejando a otras 28.000 sin electricidad.
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