El divorcio de Britney Spears y Sam Asghari ya es oficial, nueve meses después de su separación. Sin embargo, no hay motivo de celebración al ver el estado en el que se encuentra la cantante. El mismo día que se anunciaba el final de su matrimonio se publicaban unas fotografías de la artista en un altercado en el conocido Chateau Marmont. En las imágenes aparece descalza, con unos pantalones cortos remangados y sin camiseta, tapada con una almohada y una manta.

Según ha publicado Page Six, las imágenes se tomaron después de que Britney Spears y su actual pareja, Paul Richard Soliz, se pelearan en una de las habitaciones. El Chateau Marmont es un hotel famoso entre las celebrities de Hollywood, es el destino habitual para fiestas en ocasiones descontroladas.

Tras haber estado bebiendo y haber amenazado a algunos empleados del lugar, entorno a las 11 de la noche se retiraron a su suite y siguieron de fiesta. Según TMZ, llamaron a los servicios de emergencia tras oír a la artista gritando y "fuera de control" en el interior de su habitación. En teoría la pelea con su pareja habría escalado hasta llegar a las manos, y Britney tendría incluso cortes en una pierna.

La versión de Britney Spears

Sin embargo, la propia Britney ha explicado en sus redes sociales que se torció el tobillo. "Los paramédicos aparecieron en mi puerta inmediatamente. Por supuesto, esto causó un enorme escándalo, algo innecesario porque solo necesitaba hielo", añade. Pero, dando un giro a la situación, la cantante acusa a su madre, Lynne Spears, de orquestar todo el incidente.

Según explica, los paramédicos aparecieron en la habitación sin que nadie hubiera pedido ayuda y su madre la llamó instantáneamente. "No he hablado con ella en seis meses pero me llama justo después de que ocurra y antes de que salieran las noticias. Lo organizó todo igual que hacía antes. ¡Ojalá tuviera abuelos! No la soporto", finalizó Britney en la publicación en la que enseña su tobillo hinchado.

Los medios estadounidenses aseguran que Britney Spears está peor que nunca. Ha ganado el caso contra su padre y ha conseguido el divorcio que quería, por lo que es más libre de lo que ha sido en años. Sin embargo, preocupa su estado de salud. Además, a aquellos más cercanos a ella no les gusta su relación con Paul Richard Soliz, que tiene un pasado delictivo.