El Gobierno eslovaco ha decretado este miércoles 24 de noviembre un confinamiento total del país para toda la población, una medida que se implantará durante los próximos 14 días. Con ello, el Ejecutivo espera poder frenar el alto ascenso de las infecciones de coronavirus experimentadas durante los últimos días.

Así lo ha confirmado el Primer Ministro de Eslovaquia, el conservador Eduard Heger, en una comparecencia ante los medios. "Si la situación permite una apertura, serán los vacunados" y los que hayan superado la enfermedad "los que se beneficiarán de ello", ha añadido el jefe del Gobierno, que evaluará en diez días, junto al comité experto, si es adecuado o no prolongar la medida.

La tasa de vacunación en el país, que cuenta con una población de 5,4 millones de habitantes, se sitúa en el 43%. Unas cifras muy alejadas del más del 80% que ostenta España. Y es que Europa del Este tiene la mayor incidencia de contagio de toda la Unión. Concretamente, Eslovaquia cosecha los peores datos de incidencia acumulada en siete días en todo el mundo: 1.296 casos por 100.000 habitantes.