"No hemos hecho nada más que empezar. Ya estamos en campaña. Nuestra respuesta cambiará Oriente Próximo... tendrá eco durante generaciones". El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha confirmado a los alcaldes del sur de Israel que Hamás vivirá un infierno. Y la población de Gaza, sometida a un bloqueo total desde este lunes también. Israel ha concentrado unos 100.000 soldados y numerosos tanques en el sur, en la frontera con la Franja, y ha movilizado a 300.000 reservistas en solo 48 horas, en lo que serían los preparativos de una invasión terrestre. Hay fuentes estadounidenses que apuntan que podrían hacerlo como máximo en 72 horas. El objetivo es acabar con todas las capacidades militares de Hamás y con su control sobre Gaza.

Horas después, Netanyahu realizaba una declaración igual de contundente. "Israel está lanzando un ataque masivo como nunca se había visto antes. Querían guerra, tendrán guerra. Nosotros sabíamos qué era Hamás y ahora lo sabe el mundo. Son el Ejército Islámico (Daesh). Afrontamos días difíciles".

Y ha lanzado un serio aviso a Hizbulá, que amenaza con más ataques en el norte de Israel: "Si entra en la guerra, el Ejército de Israel destrozará Damasco y convertirá al dictador Bashar Al Asad en su objetivo. EEUU nos respalda y un portaaviones está de camino". Hizbulá ha denunciado la muerte de cuatro de sus combatientes y empieza a dar señales de estar movilizándose.

Prueba de que se avecinan días aún más dramáticos de los vividos es la advertencia lanzada por los militares israelíes a los ciudadanos para que se preparen para estar tres días en los refugios donde acuden cuando hay bombardeos. Han de abastecerse de comida, agua y carga para las baterías por si hay cortes de electricidad.

Sería una nueva fase de la Operación Espadas de Hierro en respuesta a la Inundación de Al Aqsa, un ataque sin precedentes de Hamás que arrancó con una oleada de miles de cohetes lanzados desde la Franja y siguió con la entrada en el territorio israelí de cientos de terroristas. Desembocó en la declaración de guerra de Israel contra Hamás. Más de 1.800 personas, un millar entre israelíes y extranjeros en Israel, y más de 800 palestinos en Gaza y Cisjordania, entre ellos 140 niños, han muerto desde el sábado. Hamás tiene en su poder unos 150 rehenes.

En una veintena de localidades del sur de Israel, pequeñas comunidades, se vivieron horas de pesadilla. La masacre en la rave en el desierto de Neguev, donde asesinaron a 260 jóvenes, es ya un símbolo de la barbarie de la incursión de Hamás.

Tenemos que entrar. no podemos negociar ahora (...) Será una guerra larga y difícil"

benjamin netanyahu, primer ministro de israel

En la conversación que mantuvo Netanyahu el domingo con el presidente estadounidense, Joe Biden, le dijo que no tenía otra opción que lanzar una operación terrestre en Gaza. "Tenemos que entrar. No podemos negociar ahora", le explicó, según ha revelado en exclusiva Axios. EEUU ha prometido ayuda a Israel el tiempo que sea necesario y de forma incondicional. Está de camino el portaaviones USS Gerald R. Ford, el más nuevo y avanzado de la Armada de Estados Unidos, una muestra del firme respaldo de Washington a los israelíes. Hay 11 estadounidenses entre los muertos en Israel.

El primer ministro israelí ha reiterado que será "una guerra larga y difícil". En el verano de 2014, tras diez días de bombardeos, Israel invadió Gaza otros 40 días. La Operación Margen Protector, la más sangrienta hasta el momento, se saldó con 2.205 muertos palestinos y 71 israelíes.

Biden se interesó por los 150 rehenes en poder de Hamás, pero Netanyahu contestó que si mostraban debilidad con los terroristas sería peor. Según fuentes de Hamás, habría militares y civiles, incluidos extranjeros, como chinos y rusos con doble nacionalidad, y tailandeses. Dos españoles están desaparecidos: una joven soldado hispanoisraelí y un vasco que vivía en un kibbutz.

Este lunes, el portavoz de las Brigadas Ezzeldin Al Qassam, Abu Obeida, ha amenazado con ejecutar a los rehenes israelíes si continúan los bombardeos sobre Gaza. "Cada vez que se bombardee a civiles inocentes en Gaza, ejecutaremos a uno de los rehenes bajo nuestra custodia. Grabaremos y difundiremos la ejecución", dijo Abu Obeida este lunes.

Hamás dijo previamente que pretendían intercambiar a los israelíes que tienen en su poder por los presos palestinos. En 2011 Israel liberó a más de 1.000 presos palestinos por el soldado Shalit. "Lamentamos esta decisión, pero la responsabilidad sería del enemigo sionista y su liderazgo". Estas ejecuciones emularían las realizadas por el autodenominado Estado Islámico en Siria.

A la par, Hamás se ha mostrado dispuesto a negociar una tregua en las últimas horas. La amenaza a los rehenes y su voluntad de negociar desvelan que la organización terrorista ya está viendo que Israel va muy en serio con sus anuncios de que serán aniquilados.

Si tenemos datos sobre la localización de los rehenes, evitaremos actuar, pero si no los tenemos, atacaremos todos los objetivos de Hamás"

portavoz del ejército israelí

El Ejército israelí, a través de su emisora, ha dicho que los bombardeos sobre Gaza, que ya han alcanzado 1.200 objetivos, no cesarán. "Los ataques sobre la Franja se mantendrán de forma extensa y potente. Si tenemos información de inteligencia sobre la localización de los rehenes, evitaremos actuar sobre ese emplazamiento, pero si no tenemos datos, atacaremos todos los objetivos de Hamás", ha difundido un portavoz del Ejército.

"Estamos librando una guerra por nuestro futuro", ha dicho el ministro de Defensa, Yoav Gallant. Según ha explicado en una visita al mando de la Fuerza Aérea, "Hamás ha de pagar un altísimo precio para garantizar nuestra existencia en la región".

En primer lugar, el Ejército israelí ha tenido que dedicarse a recuperar el control sobre todo su territorio. De nuevo hubo infiltraciones en la madrugada del lunes y la lucha fue encarnizada en poblaciones como Sderot. Pero en la noche del lunes ya no hubo más.

Llama la atención que Hamás lograra entrar con tanta facilidad en Israel el sábado y que sus combatientes hayan resistido tanto tiempo. Algunos quedan aún, según ha reconocido el propio Netanyahu.

El fallo de seguridad es sorprendente. Los servicios de Inteligencia egipcios señalaron que habían avisado a Netanyahu que se estaba preparando una operación de grandes dimensiones, y el primer ministro israelí parece que no lo tomó en serio, pero las autoridades israelíes lo han negado. Resulta inexplicable cómo el Shin Bet no manejó información sobre el operativo de Hamás, que debió de prepararse durante largo tiempo.

"Hay un gran número de víctimas israelíes y palestinas. Nuestros colegas palestinos trabajan día y noche para hacer frente a la afluencia de personas heridas"

Matthias Kannes, coordinador msf en gaza

Ataques aéreos y bloqueo total

Mientras tanto, las Fuerzas Aéreas israelíes han machacado sin tregua la Franja de Gaza, incluidos dos campos de refugiados, Shati y Al Jabalia, donde hubo numerosos fallecidos. Hamás tiene el control de la Franja desde 2007, que tiene una densidad de población de 5.500 personas por km2, una de las mayores del mundo. Israel ha pedido a los gazatíes de siete zonas de la Franja que abandonen sus domicilios porque van a acometer una operación antiterrorista. Miles se han refugiado en escuelas de la ONU.

"La situación es horrible. Hay un gran número de víctimas israelíes y palestinas. Nuestros colegas palestinos trabajan día y noche para hacer frente a la afluencia de personas heridas. Tras el bombardeo en el campo de refugiados de Al Jabalia, nuestro equipo ha atendido a más de 50 personas en el hospital de Al Awda", sostiene Matthias Kannes, coordinador general de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Gaza.

Los ataques israelíes han tenido como objetivo varios edificios, como la Torre de Palestina, entre ellos la vivienda de Rawhi Mustafa, miembro del liderazgo de Hamás. Sin embargo, también han resultado afectados los hospitales, por ello un portavoz del Ministerio de Sanidad de Gaza ha pedido que se abra un corredor humanitario para permitir que lleguen los suministros médicos. La situación en los centros sanitarios es crítica por falta de combustible y medicamentos.

Los gazatíes, que ya padecen escasez de electricidad, y medicinas, también sufren ahora un bloqueo total, que ha sido anunciado por el ministro de Defensa. "No habrá electricidad, ni comida, ni combustible, nada. Estamos luchando contra animales humanos y actuaremos en consecuencia", dijo Gallan.

El agua será un problema, ya que la mayor parte de la que procede de su acuífero costero no es potable. Para generar electricidad en su principal central necesita combustible, que importa y tampoco podrá entrar. Dependerá de lo que tenga almacenado. Como señala Peter Beaumont, ex corresponsal en la zona de The Guardian, "será clave cuánta ayuda está dispuesto Egipto a permitir que pase a través de su frontera con Gaza. Durante años ha contribuido al bloqueo, pero su población va a ser muy sensible al sufrimiento del pueblo palestino".

El corresponsal de Al Jazeera, Charles Stratford, confirmaba que el bombardeo ha sido "masivo y constante" en las últimas horas, al tiempo que ha constatado que la concentración de tropas israelíes en la frontera "sugieren que se está preparando algún tipo de invasión terrestre".

Netanyahu ha aludido a la necesidad de restaurar la imagen de fortaleza de Israel para justificar su plan de aniquilar a Hamás con bombardeos aéreos y, una vez debilitado el enemigo, entrar en la Franja. Como señala Lawrence Freedman, profesor emérito de War Studies en el King's College de Londres, a pesar del golpe que ha asestado Hamás a la imagen de invulnerabilidad de Israel, habría motivos para actuar con cautela.

"En primer lugar, Hamás estará preparada. Incluso una incursión limitada podría resultar costosa. En segundo lugar, no será nada fácil que el Ejército de Israel se haga con el control de Gaza. En tercer lugar, el conflicto puede extenderse", señala Freedman en Letras Libres. El norte de Líbano está calentándose y Hizbulá parece dispuesto a ayudar a Hamás. Una escalada que afecte al Líbano, Siria y el riesgo de que también implique a Irán, que aplaudió la operación de Hamás aunque asegura que no está detrás, es tan posible que estremece.